CIUDAD DEL VATICANO, 3 de febrero de 2016 (VIS).- Esta mañana, al
final de la Audiencia General, el historiador Rinaldo Marmara ha
presentado al Papa FRANCISCO una copia de su libro ''La squadra
Pontificia ai Dardanelli 1657 / İlk Çanakkale Zaferі 1657''. El volumen
es una transcripción de los manuscritos italianos y turcos del fondo
Chigi de la Biblioteca Vaticana, y un relato de la participación de la
flota pontificia en la Segunda Batalla de los Dardanelos en 1657. El
libro, a pesar de los dolorosos recuerdos de la historia, ilustra la
importancia de la investigación académica y de la apertura de los
archivos a las investigaciones históricas al servicio de la verdad y de
la construcción de puentes de cooperación y entendimiento mutuo, informa
un comunicado publicado hoy en la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
A
la luz de este hecho, se ha evidenciado y apreciado el renovado
compromiso de Turquía para poner sus
archivos a disposición de los historiadores e investigadores de las
partes interesadas, con la intención de llegar conjuntamente a una mejor
comprensión de los acontecimientos históricos, del dolor y de los
sufrimientos padecidos, independientemente de la propia identidad
religiosa o étnica, de todas las partes implicadas en las guerras y
conflictos, incluidos los trágicos acontecimientos de 1915. Los hechos
dolorosos de la historia no deben olvidarse; requieren en cambio un
cuidadoso examen y una reflexión para que puedan llevar a la curación y
la purificación de la memoria, tan necesaria para la reconciliación y el
perdón para los individuos y de los pueblos, como afirmaba San Juan
Pablo II.
La memoria del sufrimiento y del dolor, tanto del pasado
lejano pasado como del más reciente, como en el caso del asesinato de
Taha Carim, embajador de Turquía ante la Santa Sede, en junio de 1977, a
manos de un grupo terrorista, nos exhorta a reconocer también
el sufrimiento del presente y a condenar todos los actos de violencia y
terrorismo, que sigue causando víctimas, todavía en nuestros días.
Particularmente
odiosa y ofensiva es la violencia y el terrorismo cometido en el nombre
de Dios y de la religión. Como el Papa FRANCISCO afirmó durante su
visita a la República Centroafricana: "Entre cristianos y musulmanes
somos hermanos ... Juntos, digamos no al odio, no a la venganza, no a la
violencia, especialmente a la que se comete en nombre de una religión o
de Dios". Que estas palabras inspiren a todas las personas de buena
voluntad a recordar y afirmar su hermandad, solidaridad, compasión y
humanidad compartidas y a reiterar su posición común contra toda
violencia''.