Port au Prince, HAITÍ (Agencia Fides, 08/02/2016) – Un acuerdo in extremis, firmado por el
presidente Michel Martelly, que ha llegado a la conclusión de su
mandato, así como de los presidentes del Senado y de la Cámara de
Diputados, Jocelerme Privert y Cholzer Chancy, para la designación de un
presidente de transición que organice las nuevas elecciones, parece
evitar un vacío de poder en Haití. El acuerdo firmado el 6 de febrero
prevé, según la información local, que la Asamblea Nacional elija a un
presidente interino en los próximos días, que luego proceda a preparar
las elecciones para el 24 de abril.
Según la información que habían dado fuentes locales a la Agencia Fides, el representante de la oposición, Jude Celestin,
había renunciado a presentarse a la segunda vuelta de las elecciones
presidenciales denunciando un “golpe de estado electoral”. A su gesto se
agregaron las dimisiones de algunos miembros del Consejo Electoral
Provisional (CEP); la destrucción de algunos centros de votación por
parte de los manifestantes; una resolución del Senado pidiendo el
posticipación de las elecciones; una apelación de la Iglesia Católica al
diálogo y a la negociación; el anuncio de grandes manifestaciones para
evitar una ronda electoral.
Ante esta crisis, el presidente Martelly se había comprometido a dejar
la dirección del gobierno, según lo establecido por la Constitución, por
lo que el gobierno ha propuesto cuatro alternativas: una nueva
constitución, la continuidad del mandato de Martelly para asegurar un
nuevo proceso electoral, el paso del control del país a la Asamblea
nacional, confiar el gobierno al poder judicial.