Baghdad, IRAQ (Agencia Fides, 09/05/2017) – En Iraq, marcado por las campañas militares
para liberar Mosul de los yihadistas del auto-proclamado Estado Islámico
(Dash), continúan los casos de predicadores y guías musulmanes que
desde las mezquitas o en sus escritos publicados en los medios sociales,
continúan definiendo a los cristianos, judíos y mandéis como
“infieles”, y siguen instigando a tratarlos con violencia y
discriminación al igual que los yihadistas del Daesh o de al Qaida. Lo
ha denunciado con tono alarmado en un documento el Patriarcado de
Babilonia de los Caldeos, subrayando que los discursos impregnados de
“retorica incendiaria” contra los cristianos y contra otras comunidades
religiosas presentes en Iraq no ayudan al islam, sino que hacen alzar
muros entre los seres humanos y contribuyen incluso a “alimentar la
islamofobia”. Además – se lee en el documento, firmado por el Patriarca
Louis Raphael Sako – socavan la unidad nacional y ponen en peligro
la
paz, visto que los cristianos son una parte integral de la estructura
nacional iraquí, de modo que incluso los antepasados de muchos
musulmanes compartían la fe en Cristo, antes de que las tierras de
Mesopotamia fuesen conquistadas por los guerreros árabes musulmanes.
En el texto publicado por el Patriarcado, y recibido en la Agencia
Fides, se recuerda a las autoridades civiles y religiosas que deben
oponerse a todas las expresiones que fomentan el odio sectario, citando
el verso 29 de la Sura XVIII del Corán: 'Diles: la Verdad proviene de su
Señor. Quien quiera que crea, y quien no quiera que no lo haga'.