Durante los cordiales coloquios, además de recordar el generoso servicio de la Guardia Suiza Pontificia el día del juramento de sus nuevos miembros, se ha evidenciado el deseo común de reforzar todavía más las buenas relaciones entre la Santa Sede y Suiza y de intensificar la colaboración entre la Iglesia Católica y el Estado.
Sucesivamente, se han abordado diversos temas de interés común, como el futuro del continente europeo, la acogida de los emigrantes, el reto del mundo del trabajo para los jóvenes, la lucha contra el terrorismo y el compromiso en la defensa del medio ambiente.