Chilpancingo, MÉXICO
(Agencia Fides, 24/09/2014) – El Procurador General del estado de
Guerrero, en México, ha abierto una investigación sobre la muerte
del párroco de la parroquia de Arcelia, el padre José Acuña
Asención Osorio, cuyo cuerpo ha sido hallado en el río Balsas. El
sacerdote había desaparecido el pasado domingo día 21 de
septiembre, dejando preocupados a los fieles que le esperaban para la
Misa. La parroquia pertenece a la diócesis de Ciudad Altamirano.
Según la nota enviada a la Agencia Fides por una fuente local, el
cuerpo del sacerdote ha sido hallado, gracias a un aviso anónimo,
muy cerca del pueblo de Santa Cruz de Las Tinajas, en el municipio de
San Miguel Totolapan (región de Tierra Caliente, en el centro del
país), por lo tanto lejos de su residencia.
La policía local,
ha rescatado del agua el cuerpo del sacerdote y trasladado al
tanatorio de la zona, para realizar la autopsia. Según cuanto la
información hasta el momento, la causa de la muerte parece ser la
asfixia por ahogo. Un pariente cercano al sacerdote y un asistente de
la parroquia han realizado el reconocimiento y han pedido la
restitución del cuerpo para la sepultura. La fiscalía está
investigando para determinar las circunstancias exactas de la muerte,
ya que hay sospechas fundadas de que un posible asesinato. De hecho,
en la zona, no es el primer evento que se produce, ya que la técnica
de mantener la cabeza de la gente bajo el agua hasta la asfixia es
utilizada por el crimen con el fin de realizar extorsiones.