Ras Al Khaimah,
EMIRATOS ÁRABES (Agencia Fides, 30/9/2014) – Ayer 29 de septiembre
ha comenzado y continuará hasta el jueves, 2 de octubre la Asamblea
de la Conferencia de Obispos Latinos de las Regiones Árabes (CELRA).
Este año, el encuentro se celebrará en la iglesia de San Antonio de
Padua en Ras al Kaimah, la capital del homónimo emirato, en los
Emiratos Árabes Unidos. Durante la reunión, los obispos discutirán
temas pastorales relacionados con la familia - tema del Sínodo
extraordinario que está a punto de comenzar en Roma - y en el
cuidado pastoral de los inmigrantes en los países árabes por
motivos de trabajo.
El cuidado pastoral
de las comunidades de migrantes representa el corazón de la misión
de los agentes pastorales presentes en los países de la Península
Arábiga. Las mismas Emiratos Árabes Unidos, sede de la asamblea de
los obispos, son un país predominantemente musulmán con un mayor
porcentaje de presencia cristiana en virtud del hecho de que los
inmigrantes extranjeros por trabajo representan el 70 por ciento de
los 4 millones de habitantes, y más de la mitad de ellos son
bautizados. Sólo los católicos - en su mayoría filipinos e indios
- son alrededor de un millón.
“En nuestras
reuniones - informa a la Agencia Fides el arzobispo Maroun Laham,
vicario patriarcal para Jordania del Patriarcado Latino de Jerusalén
- hablaremos también sobre la contribución que las comunidades
cristianas locales pueden ofrecer en el futuro al camino de la
reconciliación en los países de la zona sacudidos por conflictos,
guerras y limpiezas étnico-religiosas, empezando por Siria, Iraq y
Tierra Santa”.
La iglesia de San
Antonio de Padua fue consagrada el 14 de junio de 2013 por el
Cardenal Fernando Filoni, Prefecto de la Congregación para la
Evangelización de los Pueblos. En esa ocasión, dirigiéndose a los
fieles presentes en la consagración, casi todos extranjeros, el
cardenal dijo: “Ustedes provienen de diferentes países, pero
forman un único pueblo de Dios. La variedad de vuestras culturas da
testimonio de la riqueza multiforme de vuestros orígenes pero, en
una medida igualmente significativa, la armonía de vuestras voces
expresa la unidad de vuestra fe. En vosotros vive el misterio de la
Iglesia”.