Jerusalén, TIERRA
SANTA (Agencia Fides, 22/09/2014) - La decisión del Ministerio del
Interior Israelí de permitir añadir la calificación “arameo” a
la de “cristiano”, para sustituir el término “árabe” en los
documentos de identidad de los cristianos palestinos ciudadanos de
Israel, es denunciado por los obispos católicos de Tierra Santa como
“un intento de separar a los palestinos cristianos de los demás
palestinos”, en un documento emitido por la Comisión Justicia y
Paz del Consejo de Obispos Católicos que denuncian como motivaciones
presuntuosas e ideológicas las medidas adoptadas en este sentido por
Gobierno de Israel.
Según lo informado
por la prensa israelí, el 16 de septiembre, el Ministro del Interior
de Israel ha firmado la decisión de reconocer la identidad “aramea”
como una identidad nacional distinta, que se añadirá en el registro
de nacionalidad en el país. La decisión fue tomada de forma
explícita para permitir que 200 familias cristianas se identifiquen
como pertenecientes a las antiguas nacionalidades, por lo que se
registrarán como “arameos” en lugar de como árabes en los
documentos de identidad. En el documento redactado el mismo 16 de
septiembre por la Comisión Justicia y Paz de los Obispos Católicos
de Tierra Santa, se denuncia como operación artificial y de
orientación política que empuja a recuperar en el pasado remoto de
los pueblos de Oriente Medio una identidad nacional separada, que se
dará a los cristianos presentes en Israel: “el idioma arameo –
se lee el documento, enviado a la Agencia Fides - fue la lengua de
los Judíos durante siglos. Es decir, hasta la reintroduc ción del
hebreo, sólo a finales del siglo 19. Los países árabes del
Levante, hablaron a través de la historia y los siglos, el arameo,
el griego y el árabe hasta la difusión definitiva del árabe. Hoy
en Israel somos árabes palestinos. Si este intento de separar a los
palestinos cristianos de otros palestinos tiene por objeto proteger o
defender a los cristianos, como afirman algunas autoridades israelíes
- y el comunicado se dirige al gobierno israelí - declaramos:
restituirnos como primera cosa nuestros hogares, nuestras tierras y
pueblos que habéis confiscado. Segunda cosa: la mejor protección
para nosotros es dejadnos con nuestra pueblo. Tercero: la mejor
protección para nosotros es que se emprenda seriamente el camino de
la paz”.
El pronunciamiento
episcopal también contiene un llamamiento a “algunos cristianos
palestinos en Israel que apoyan esta idea”, y están dispuestos a
reclamar su identidad nacional “aramea” para cancelar su arabismo
y poder acceder así al servicio militar en el 'ejército israelí:
“no es posible”, se lle en el documento “que hagáis daño a
vuestro pueblo para satisfacer vuestros intereses personales del
momento. Con este punto de vista, no hacéis el bien, ni a vosotros
mismos ni a Israel. Israel necesita cristianos a quienes Cristo dijo:
'Bienaventurados los pacificadores' y no los que desfiguran su propia
identidad”.