Jerusalén, ISRAEL (Agencia Fides, 23/12/2015) – La Asamblea de los Obispos Ordinarios
Católicos de Tierra Santa ha venido a saber “con consternación” e
inmediatamente han condenado las declaraciones anti-cristianas
difundidas recientemente por el rabino Benzi Gopstein, precisamente en
los días en que se celebra el quincuagésimo aniversario de la
declaración conciliar Nostra Aetate, que abrió una nueva fase de
relaciones entre Judíos y Iglesia Católica
En los últimos días, el rabino, conocido por sus posiciones extremistas y
líder del movimiento Lehava, creado para oponerse a los matrimonios
entre Judíos y no Judíos, ha publicado en un sitio web su propuesta –
publicada después por la prensa israelí - de prohibir las fiestas
cristianas y expulsar a los cristianos de Israel, “antes de que estos
vampiros”, así escribe Gopstein, “se beban nuestra sangre”. En su
discurso, el rabino acusa a los cristianos de querer hacer proselitismo
en el Estado judío.
En un comunicado, difundido por los canales oficiales del Patriarcado
Latino de Jerusalén, la Asamblea de Obispos Ordinarios Católicos de
Tierra Santa condena las palabras “irresponsables del rabino Gopstein”,
calificándolas como “un ultraje al mismo diálogo” florecido después del
Concilio Vaticano II. Los obispos católicos, que en otras ocasiones
habían denunciado las provocaciones amenazadoras del rabino extremista,
apelan a las autoridades israelíes, señalando que expresiones similares
“representan una amenaza real para la coexistencia pacífica en el
país”, ante lo cual hay que “tomar las medidas necesarias en el interés
de todos los ciudadanos”.
En el pasado, el rabino Gopstein había justificado los ataques y la
quema de iglesias y mezquitas situadas en el Estado judío, como intentos
legítimos para purgar la tierra de Israel de los cultos idolátricos.