Bangui, REPÚBLICA CENTROAFRICANA (Agencia Fides, 22/11/2016) - La crisis en la República Centro africana ha
demostrado que no son solo las armas tomadas de los depósitos líbicos en
la guerra civil del 2011 las que inflaman las guerras en el África
sub-sahariana, sino que además existen flujos importantes de tráfico
ilegal de armas provenientes de otras crisis como la de Mali y la de
Costa de Marfil. Así lo afirma un reciente informe de la Ong inglesa
Conflict Armement Research (CAR) según el cual en la República Centro
africana el 20% de los fusiles AK47 (el Kalashnikov ruso) y más del 35%
de los type 56-2 (su copia china) provienen de Costa de Marfil.
Tras la larga crisis político-militar de Costa de Marfil (2002-2011) en
el País de África occidental han permanecido en circulación varias armas
ligeras, en gran parte pertenecientes a las formaciones de guerrilla
que controlaban el noroeste de Costa de Marfil. Parte de estos arsenales
ahora están disponibles en los circuitos ilegales que van desde África
occidental a todo el Sahel. Esto demuestra la importancia de las
actividades de des-movilización y desarme de los contingentes tras
llegar a un acuerdo de paz.
El informe es el resultado de las investigaciones en la zona que han
permitido recuperar los números de serie de las armas y municiones
utilizadas por las fuerzas irregulares. Además de las armas provenientes
de Costa de Marfil y Libia, el informe destaca el papel de Sudán, que
también tiene sus propias fábricas de armas y municiones, en el fomentar
la inestabilidad en el sur del Sahara y el Sahel.