Freetown, SIERRA LEONA (Agencia Fides, 26/03/2021) - Al menos 5.000 personas se han quedado sin
hogar a causa del vasto incendio que a última hora de la tarde del 24 de
marzo ha devastado la favela de Freetown, la capital de Sierra Leona.
“Toda la comunidad ha sido arrasada”, ha declarado la alcaldesa de
Freetown, Yvonne Aki-Sawyerr, en un comunicado publicado en Facebook.
“De nuevo, no había acceso para los bomberos. Un edificio de seis
plantas en construcción bloqueaba cualquier acceso disponible”, ha
denunciado.
La alcalde ha subrayado que “la reducción del riesgo de catástrofes no
puede producirse sin una planificación urbana eficaz y un régimen de
permisos de construcción centrado en la reducción de los riesgos
medioambientales causados por el hombre”. “Únase a nosotros para rezar
por las víctimas”, ha pedido para concluir.
El incendio comenzó hacia las 18.00 horas del 24 de marzo y se extendió rápidamente a lo largo de la bahía de Susan.
Los residentes se vieron obligados a huir, abandonando la mayoría de sus
pobres pertenencias a medida que el fuego avanzaba. Según la Cruz Roja
local, se han producido unos ochenta heridos pero ninguna víctima
mortal.
La ciudad, muy poblada, ha crecido de forma caótica y desordenada, sin un plan regulador ni planes de evacuación o rescate.
Aún se recuerda la tragedia de la noche del 13 al 14 de agosto de 2017,
cuando una cresta de la montaña llamada “la barra del pan” se derrumbó
sobre la aldea de Regent, a 6 millas de Freetown, causando al menos
1.100 muertos. En una entrevista con la Agencia Fides, el padre Gerardo
Caglioni, misionero javeriano con una larga experiencia de vida en
Sierra Leona, denunció que “en tantos años la selva tropical ha sido
engullida y todo lo que contenía la tierra simplemente ha desaparecido.
Pero luego vemos que en esos cerros pelados se han construido casas de
todos los tamaños sin un plan maestro, sin caminos y desagües o
alcantarillas, sin un mínimo de ley que contenga todo tipo de abuso
edilicio”. “Dónde están las escuelas, las
clínicas, los lugares comunitarios y de abastecimiento? ¿De dónde sacan
el agua para las distintas necesidades, especialmente en la estación
seca? Tantas preguntas sin respuesta, ningún plan de crecimiento y
desarrollo, ningún plan para tiempos de emergencia”. Preguntas que aún
esperan respuesta.