Bujumbura, BURUNDI (Agencia Fides, 14/12/2015) - Han sido entre 150 y 200 las personas
encontradas muertas en lo que parecen ser ejecuciones extrajudiciales en
Bujumbura y en la “Bujumbura rural”, la zona suburbana de la capital de
Burundi. Lo comunican fuentes locales de la Agencia Fides, que por
razones de seguridad han pedido permanecer en el anonimato.
“Oficialmente, la cifra de muertos es de 87, pero la sociedad civil y
otras fuentes afirman que los muertos encontrados por las calles van de
150 a más de 200. Según las autoridades las personas asesinadas, en su
mayoría jóvenes, estaban armados. Pero esas armas no han sido mostradas
públicamente” subrayar nuestras fuentes. “La mayoría de estos cadáveres
fueron encontrados con las manos atadas a la espalda y con disparos de
bala en la cabeza. Un signo claro de ejecución extrajudicial”. “El
número de personas que han muerto de esta manera podría ser aún mayor,
ya que se sospecha la existencia de fosas comunes”, añade nuestra
fuente.
La ola de ejecuciones extrajudiciales (se sospecha que cometidas por la
policía en lugar del ejército) ha sucedido tras el asalto coordinado
contra tres campamentos militares en Bujumbura en la noche entre el 10 y
11 de diciembre por parte de
un grupo de rebeldes.
“El asalto fue rechazado, pero la mayoría de los rebeldes se las
arreglaron para regresar a sus escondites en las montañas”, dicen
nuestras fuentes, según als cuales se está tratando de provocar un nuevo
conflicto étnico. “La mayoría de los muertos son tutsis. Las
manifestaciones contra el tercer mandato del presidente Pierre
Nkurunziza se han producido tanto en los barrios de los Hutus como en
los de los Tutsi. Por tanto, la crisis actual es política y no étnica.
Pero al atacar principalmente a la oposición tutsis y no mencionando a
la Hutu por el momento, se está tratando de dar un matiz étnico a la
crisis”.
Según fuentes de Fides, “desde el principio de la crisis por el tercer
mandato del Presidente en violación de la Constitución, el 26 de abril,
ya se han producido de 500 a 600 asesinatos de personas. Además hay que
sumar a los desplazados internos y a los burundeses obligados a
refugiarse en países vecinos”.