Yaoundé, CAMERÚN (Agencia Fides, 27/01/2016) - Las autoridades de Camerún han declarado que
han infligido “fuertes pérdidas” entre los extremistas nigerianos de
Boko Haram, los cuales el 25 de enero cometieron un atentado suicida
cuádruple en la ciudad de Bodo, al extremo norte del país, en la
frontera con Nigeria, provocando la muerte de 32 personas e hiriendo a
otras 86.
Según un comunicado del gobierno de Yaundé, al menos 17 terroristas de
Boko Haram han muerto y una docena han sido detenidos. El comunicado de
prensa también informa que se han encontrado los cuerpos de dos policías
cameruneses secuestrados el 4 de enero en Dabanga, en la frontera con
Nigeria.
Sin embargo, los militares de Camerún están acusados de matar a cuarenta
civiles nigerianos durante unas incursiones en la frontera realizadas
inmediatamente después de los atentados del 25 de enero.
Según el subcomandante de un grupo de auto-defensa local de Nigeria, los
cuerpos fueron encontrados en la ciudad de Gwadale, en la frontera
entre los dos países, después de que las tropas cameruneses la cruzasen.
Los militares de Youndé están involucrados en un grupo de trabajo
multinacional encargado de luchar contra Boko Haram y por ello puede
actuar en el territorio de Nigeria en acuerdo con las autoridades de
Abuja.
En los últimos meses las tropas de Camerún han sido acusadas de cometer
crímenes contra la población civil en Nigeria. En particular, el 30 de
noviembre, algunos refugiados nigerianos afirmaron que los soldados
cameruneses habían matado a 150 personas, saqueado el ganado y arrasado
pueblos enteros en una franja de tierra de 150 kilómetros que se
extiende a lo largo de la frontera entre ambos países. Nigeria se había
negado a crear una “tierra de nadie” a lo largo de la frontera entre
Nigeria y Camerún para prevenir la aparición de ataques terroristas.