Mosul, IRAQ (Agencia Fides, 20/10/2017) – La ciudad iraquí del norte de Mosul ya no está
bajo el control de la milicia yihadista del Estado Islámico desde el
pasado mes de julio. Pero en la Universidad, los estudiantes todavía
tienen que adaptarse, al menos parcialmente, a los trajes islámicos y a
las reglas en el vestir también. Un gran cartel colocado en la entrada
de la Universidad (véase foto) recuerda a los estudiantes el tipo de
ropa y peinado que necesitan para poder entrar en los edificios de la
universidad y seguir las clases. El “código de vestimenta” obligatorio
prescribe el uso del velo para todas las estudiantes, musulmanas o no
musulmanas.
La Universidad ha reanudado sus actividades y los estudiantes han
comenzado a asistir a clase, aunque grandes sectores de los edificios de
la universidad están destruidos por los bombardeos y aún no han sido
restaurados. Además de las desventajas logísticas, los estudiantes
cristianos, - dice la Agencia de Información Ankawa -, expresan su
preocupación por las actitudes intolerantes de rigidez expresadas por
algunos de sus colegas musulmanes.
En la Universidad de Mosul, la presión ejercida por el radicalismo
islamista había obligado a muchos estudiantes cristianos a usar el velo
desde 2004 hasta 2005, mucho antes de que la ciudad cayera en manos de
Daesh.
Ahora, después del trágico paréntesis del régimen yihadista, entran en
vigor códigos de conducta y disposiciones que parecen estar relacionados
con un proyecto de islamización de la vida social. Mientras se
multiplican las señales de la creciente “decepción” de las comunidades
cristianas locales con respecto a los efectos de las campañas militares
llevadas a cabo para derrotar al Estado Islámico.