Nueva Delhi, INDIA (Agencia Fides, 21/10/2017) – “La actitud del Partido de gobierno
Baratiya Janata Party (BJP) y de Sangh Parivar sobre la cuestión de las
mujeres indica una aprobación silenciosa de la discriminación contra
ellas”, dice a la Agencia Fides el padre Jacob Peenicaparambil, CMI
(Carmelitas de María Inmaculada), mientras que en la India se debate
sobre el estado de las mujeres en la sociedad.
El 11 de octubre, el Tribunal Supremo ha anulado una ley de hace 77
años, estableciendo que las relaciones sexuales entre un hombre y una
mujer menor de 18 años se considerarán “violación” sin excepción, aunque
la niña haya sido tomada como esposa. El tribunal ha impuesto una pena
de prisión que va de 10 años a cadena perpetua, según el código de
protección de menores para delitos sexuales. Aunque está prohibido por
la ley, las relaciones sexuales con menores de 18 años hasta ahora eran
consideradas por el Código Penal como licitas en las parejas casadas.
Pero ahora se ha cancelado esta excepción porque “viola los Artículos
14, 15 y 21 de la Constitución”, como ha establecido el veredicto del
Tribunal Supremo.
Esta sentencia es algo revolucionario y podría ser un impedimento para
los matrimonios con niñas, una práctica que ya estaba prohibida en la
India (con una ley del 2006), pero que todavía sigue produciéndose a
menudo: según las estimaciones citadas por el Tribunal Supremo, hay 23
millones de niñas esposas en el país, lo que significa que un matrimonio
de cada cinco viola la ley. Según una estimación reciente realizada por
el National Health Health Survey, de hecho, el 39.1% de las mujeres de
20 a 24 años contrajeron matrimonio antes de los 18 años de edad. El
fenómeno del matrimonio infantil varía de estado a estado.
El Tribunal Supremo ha pedido al gobierno central que adopte “medidas
pro-activas para prohibir el matrimonio infantil”, expresando
preocupación por miles de niñas menores casadas en ceremonias de
“matrimonio de masas” organizadas tradicionalmente con motivo de la
fiesta religiosa hindú de la Akshaya Tritiya, en primavera.
Pero al parecer, el gobierno mantiene una posición diferente al respecto
y ha presentado una petición en la que, mientras afirma que “tomando
acto de la realidad socio-económica india”, pide “una excepción para
proteger el instituto del matrimonio”.
El “Sangh Parivar”, un foro formado por numerosas organizaciones
extremistas y nacionalistas hindúes, “trabaja para salvaguardar la
cultura india contaminada por la influencia occidental, en lugar de
defender a las mujeres en la India”, señala a la Agencia Fides el p.
Peenicaparambil. “¿Por qué Sangh Parivar, quien lanzó un movimiento
violento para la protección de las vacas a nivel nacional, no ha
iniciado tal movilización contra el matrimonio infantil o las
atrocidades contra los dalits?”, se pregunta el carmelita, afirmado que
“se trata de una aprobación silenciosa de la discriminación contra la
mujer, como se indica en los textos sagrados hindúes del Manusmriti”,
que justifican el matrimonio con mujeres menores de edad”.
“Las mujeres en la India no podrán esperar recibir justicia y libertad
de un gobierno dirigido y controlado por la ideología del hindutva. La
liberación de la mujer pasa por la liberación de la ideología del
hindutva que es discriminatoria para con las mujeres y los dalit”,
continúa diciendo el sacerdote.
“Si el BJP estuviese verdaderamente interesado en la promoción de la
mujer, debería aprobar el proyecto de ley que promueve los derechos de
las mujeres y que lleva parado 21 años en el Parlamento. Además de
condenar públicamente las declaraciones despreciativas contra las
mujeres contenidas en el código de Manusmriti”, concluye el Carmelita.