Alepo, SIRIA (Agencia Fides, 15/01/2020) - Murieron como mártires, asesinados en diciembre
de 2016 por la banda de milicianos que los habían mantenido como rehenes
durante años. Este parece ser el destino de los dos arzobispos de
Alepo, el greco ortodoxo Boulos Yazigi y el sirio ortodoxo Mar Gregorios
Yohanna Ibrahim, que desaparecieron el 22 de abril de 2013 sin dejar
rastro, en una zona entre la metrópoli siria y la frontera con Turquía.
Así lo respalda una investigación realizada por un equipo de
investigación dirigido por Mansur Salib, un investigador sirio que
reside en los Estados Unidos, y difundido a través de la plataforma
digital medium.com, una nueva red social conectada a Twitter.
Según afirman los autores de la investigación, quienes asesinaron a
ambos fueron los militantes de Nour al-Din al-Zenki, un grupo
independiente involucrado en el conflicto sirio, financiado y armado
durante el conflicto por Arabia Saudita y los Estados Unidos.
La investigación recorre toda la historia, analizando detalles
considerados útiles para reconstruir su dinámica. Según los autores, el
22 de abril de 2013, los dos arzobispos habían abandonado Alepo a bordo
de una camioneta Toyota, conducida por el conductor Fatha 'Allah
Kabboud, con la intención de negociar la liberación de dos sacerdotes,
el católico armenio Michael Kayyal y el greco ortodoxo Maher Mahfouz,
previamente secuestrados por grupos yihadistas anti-Assad que en aquel
momento controlaban los territorios al este de la metrópoli siria. Mar
Gregorios y Boulos Yazigi, vestidos con ropa de civil, habrían caído en
lo que la reconstrucción presenta como una verdadera trampa, afirmando
que los dos sacerdotes Kayyal y Mahfouz habían sido secuestrados solo
para ser utilizados como "cebo" y poder llegar así hasta los dos
arzobispos. El automóvil en el que viajaban los dos metropolitanos de
Alepo fue bloqueado por el grupo de secuestradores, y el
conductor Fatha 'Allah Kabboud, un católico de rito latino, padre de
tres hijos, fue asesinado con un disparo en la cabeza. El secuestro no
fue reivindicado por ningún grupo.
En los siguientes meses y años, los rumores y anuncios sobre una posible
liberación se han ido filtrando alrededor del caso pero siempre han
resultado ser noticias infundadas.
La investigación publicada ahora en medium.com
sugiere la participación en el secuestro de personajes vinculados al
MIT (servicio de inteligencia turco), alegando que el secuestro y la
detención ocurrieron en áreas que en ese momento eran un "receptáculo
para servicios secretos extranjeros", donde difícilmente podrían haber
operado sin el apoyo de "terroristas comunes".
La historia de la desaparición de los dos metropolitanos ha estado
marcada por informaciones falsas y engañosas, como la que se difundió
pocos días después de su secuestro afirmando que habían sido liberados y
se dirigían a la catedral sirio ortodoxa de Alepo, donde una multitud
de cristianos se reunió para esperarlos en vano.
La reconstrucción informa de noticias que ya eran conocidas, junto con
acusaciones expuestas sin pruebas objetivos, incluida la sugerencia de
que George Sabra, un líder cristiano que siempre ha estado cerca de los
grupos de oposición al gobierno de Damasco, también estaría involucrado
en el secuestro de los dos metropolitanos. La hipótesis de que los
autores del secuestro tenían como objetivo obligar a los dos
metropolitanos a convertirse al Islam, para alimentar los temores y la
desesperación entre las comunidades cristianas locales, también es
expuesta en la investigación.
El testimonio más relevante entre los mencionados en el informe parece
ser el de Yassir Muhdi, presentado como uno de los carceleros de los dos
obispos, que luego fue capturado por las fuerzas sirias. "La
investigación oficial" reconoce el dossier "aún no está completa, porque
no ha sido posible hasta la fecha encontrar los restos mortales de los
dos eclesiásticos". Entre otras cosas, la reconstrucción afirma -
presentando pistas lábiles o agregando información sin evidencias
objetivas-, que los dos arzobispos habrían sido torturados y que uno de
ellos, en 2015, habría sido tratado en un centro de salud de Antioch, el
Antakya Devlet Hastanesi, en la provincia turca de Hatay. En la sección
final, la investigación afirma que los dos obispos habrían sido
asesinados y enterrados en un lugar no especificado en diciembre de
2016, momento en que las áreas al este de Alepo estaban a punto de ser
recuperadas por el ejército sirio.
En conclusión, la investigación publicada en medium.com
puede ser útil para aclarar detalles de la dinámica del secuestro y las
primeras etapas de la segregación de los dos metropolitanos, pero en
muchos pasajes no parece proporcionar elementos útiles para aclarar
definitivamente cuál ha sido el destino de Boulos Yazigi y Mar Gregorios
Yohanna Ibrahim, arzobispos de la ciudad-mártir de Alepo.