El informe señala la falta de claridad en las leyes, decretos y documentos que regulan la vida y el registro oficial de las comunidades religiosas. “El derecho de un individuo o grupo a la libertad de religión no es creado por un procedimiento administrativo”, señala el texto, sino que existe como derecho inalienable de la conciencia individual. “El registro de una comunidad debe estar al servicio de este derecho humano” y no convertirse en una excusa para ser objeto de abuso, restricciones, detenciones.
El informe de la ONU también contiene una serie de recomendaciones al gobierno, como el de “ampliar el espacio, que está muy limitado, para el pluralismo religioso en Vietnam”, adoptar la ley sobre la libertad de religión de acuerdo con los convenios internacionales; aflojar las restricciones a las comunidades religiosas.
En una nota enviada a la Agencia Fides, la Ong “Christian Solidarity Worldwide”, señala: “Aunque ha habido algunas mejoras, la plena libertad religiosa todavía no es una realidad para muchas personas y comunidades en Vietnam, incluidos los cristianos, católicos y protestantes, que pertenecen a minorías étnicas”.