Shi Jia Zhuang, CHINA (Agencia Fides, 14/07/2016) – El campamento de verano para los chicos
y jóvenes es una actividad muy consolidada en las comunidades católicas
continentales chinas, y este año ha servido como ocasión para
consolidar la solidaridad y la colaboración entre las diferentes
comunidades católicas.
Según la información recibida por la Agencia Fides, el párroco de la
parroquia de Chang Heng de Xin Xiang, una pequeña comunidad, ha recibido
la ayuda del grupo juvenil del Divino Amor de la diócesis de Zheng Zhou
para organizar su campamento. Ha sido la primera vez que los jovenes
católicos del grupo han realizado un trabajo pastoral fuera de la
diócesis. Del 4 al 11 de julio han guiado a los chicos de Chang Heng en
el estudio del catecismo, de los cantos sagrados, de la historia de la
Biblia. Algunos chicos que ya habían recibido su primera comunión, han
podido recibir la eucaristía en la misa, y tres chicos también se están
preparando para el bautismo. Según los jóvenes voluntarios, “ha sido una
experiencia extraordinaria. Los niños nos han ayudado, con sus
preguntas, a profundizar en nuestro conocimiento de la fe y la
espiritualidad”. Desde ayer, 180 chicos de la diócesis de Zhou Zhi, en
la provincia de Shaan Xi, comenzaron el campamento de verano 2016, de
hecho, se trata del “campamento del año de la Misericordia”, como han
señalado los sacerdotes y religiosas que los dirigen desde el 16 de
julio. Además 440 chicos en la diócesis de Wen Zhou han asistido al
campamento anual de verano. Según el vicario diocesano, “gracias al
apoyo de los sacerdotes y religiosas que han renunciado a su tiempo de
descanso, hemos organizado una semana de campamentos. Queremos que el
campamento de verano sea una puerta abierta a los niños y a sus padres
para participar luego a las escuelas dominicales de la parroquia, donde
pueden asistir a las actividades de la iglesia”. El campamento de verano
de la comunidad católica de Qian An, de Tang Shan, ha contado con la
presencia de una veintena de niños no católicos junto a otros setenta
católicos. Gracias a la paciencia y al afecto de las Hermanas de la
Inmaculada Concepción, han podido profundizar en los conceptos
fundamentales de la fe cristiana a través de la sagrada escritura pe
or
también con dibujos, caricaturas y expresiones de danza.