Jerusalén, ISRAEL (Agencia Fides, 16/07/2016) – El 11 de julio, el Parlamento israelí aprobó
una ley que obliga a las organizaciones no gubernamentales (ONG) que
reciben más del cincuenta por ciento de su financiación de instituciones
y gobiernos extranjeros a declarar públicamente en cada una de sus
intervenciones e iniciativas - en los espacios públicos, en el prensa
online - su dependencia de los fondos procedentes del extranjero. En
relación a esta ley, William Bell, consejero de la organización
'Christian Aid' para las iniciativas llevadas a cabo en Israel y los
territorios palestinos ocupados, ha realizado algunas consideraciones
bastante críticas.
“Esta ley”, ha dicho entre otras cosas Bell, “es un claro intento de
restringir o apagar las voces que hablan contra la injusticia. La mayor
parte de las organizaciones a las que se aplicará esta ley trabajan en
el campo de los derechos humanos, y entre ellas también están los
Partner israelíes de Christian Aid, de B'Tselem y de Breaking te
Silence”.
Christian Aid – ha reiterado el asesor Bell - “está orgullosa de apoyar a
las organizaciones de la sociedad civil israelíes que defienden los
derechos humanos y se oponen a la discriminación, y seguiremos
haciéndolo”.
Christian Aid es una agencia que apoya proyectos sociales y de
desarrollo en nombre de más de 40 iglesias y comunidades cristianas
presentes en el Reino Unido e Irlanda.