Bashiqa, IRAQ (Agencia Fides, 17/11/2016) – Las milicias kurdas peshmerga no se retirarán
de las tierras que han conquistado a los yihadistas del Estado Islámico
(Daesh) en la campaña militar por la liberación de Mosul, porque así lo
han acordado con los Estados Unidos y el gobierno iraquí. Lo ha referido
este miércoles, 16 de de noviembre, Masud Barzani, presidente de la
región autónoma del Kurdistán iraquí, en una ocnferencia con los medios
de comunicación locales en Bashiqa, la ciudad de la provincia de Nínive
liberada por los Peshmerga en la primera semana de noviembre.
Barzani también ha rechazado las acusaciones de organizaciones
comprometidas por los derechos humanos, que recientemente han acusado a
las fuerzas kurdas de demoler casas en algunas de las zonas liberadas,
reiterando que la permanencia de las personas que colaboraron con los
yihadistas del Estado Islámico no será tolerada en las tierras
recapturada por los kurdos. “Diferentes grupos étnicos y religiosos que
viven juntos, este es el Kurdistán que queremos, donde el Mullah llama a
la oración, suenan las campanas en las iglesias y los yezidis celebran
el culto en sus templos”, ha dicho entre otras cosas el presidente
kurdo.
En la ciudad de Bashiqa, que acaba de ser liberada, han sido
precisamente los soldados Peshmerga los que han vuelto a poner de nuevo
grandes cruces de madera en los tejados de las iglesias, junto a su
bandera.