La Rioja, ARGENTINA (Agencia Fides, 24/10/2018) – El sábado 27 de abril de 2019 se celebrará en
la diócesis argentina de la que fue obispo, La Rioja, la ceremonia de
beatificación de Monseñor Enrique Angelelli, de los sacerdotes Carlos
Murias y Gabriel Longueville y del laico Wenceslao Pedernera, fallecidos
durante la dictadura, con unos días de diferencia, en el verano de 1976.
Como comunicó la Secretaría de Estado Vaticana al Obispo emérito de La
Rioja, Monseñor Marcelo Daniel Colombo, actual Arzobispo de Mendoza, en
nombre del Santo Padre asistirá a la ceremonia el cardenal Angelo
Becciu, Prefecto de la Congregación para las Causas de los santos.
Monseñor Colombo describió la fecha de la beatificación como
“providencial”, ya que coincide con la fiesta de Santo Toribio de
Mogrovejo, patrono de los obispos latinoamericanos.
Según la información enviada a la Agencia Fides desde Aica, Monseñor
Colombo expresó la esperanza de que se conozca pronto el nombre del
nuevo Obispo de La Rioja. Tendrá que ser quien prepare el evento que
servirá también para “conocer mejor la vida, el mensaje y la experiencia
concreta de estos hermanos y hermanas que han dado la vida por el Reino
de Dios”. El objetivo de esta preparación, destacó el prelado, es tomar
conciencia de que “en la Iglesia argentina hay figuras que han dado lo
mejor de sí mismos para edificar el reino de Dios”.
Monseñor Enrique Angelelli (1923-1976) murió en un accidente
automovilístico simulado el 4 de agosto de 1976, poco después del
establecimiento de la dictadura militar. 38 años después dos oficiales
superiores fueron sentenciados a cadena perpetua por el asesinato del
obispo. Carlos Murias, un joven franciscano conventual de Córdoba,
trabajaba en la diócesis de La Rioja entre los pobres y en defensa del
campesinado. El 18 de julio de 1976, un grupo de hombres, que se
presentaron como policías, se lo llevaron bajo otros pretextos. El
párroco de Chamical, el francés Gabriel Longueville del fidei donum, que
estaba con él, no quiso dejarlo solo. Sus cuerpos fueron encontrados
dos días después, torturados atrozmente y rematados con un disparo. El
25 de julio de 1976, Wenceslao Pedernera, campesino y promotor del
Movimiento Rural Católico, fue asesinado en su casa por cuatro hombres
encapuchados.