Damasco, SIRIA (Agencia Fides, 20/01/2016) – Su Beatitud Mar Ignacio Aphrem II, Patriarca
siro-ortodoxo de Antioquía, organizó ayer, 19 de enero, una recepción
con motivo del inicio del nuevo año, a la que estaban invitados todos
los diplomáticos acreditados ante la República Árabe de Siria. La
recepción se llevó a cabo en la sede patriarcal, que se encuentra en el
barrio de Bab Tuma, una zona de la ciudad vieja de Damasco. Estuvieron
presentes, entre otros, el arzobispo Mario Zenari, Nuncio Apostólico en
Damasco, junto con los embajadores de Argentina, Armenia, Bielorrusia,
Egipto, India, Indonesia, Rusia, Ucrania, Cuba, Irán, Pakistán, Iraq,
Brasil y Venezuela. Durante su intervención ante los diplomáticos
acreditados ante el gobierno de Damasco, el Patriarca Mar Ignacio Aphrem
reiteró que el terrorismo y la guerra en curso en Siria son alimentados
desde el extranjero, y renovó su llamamiento al apoyo internacional del
pueblo sirio.
En los últimos días, el patriarca sirio-ortodoxo había ido a Qamishli,
en la gobernación siria nororiental de Hassake, para hacer una mediación
de reconciliación entre las milicias kurdas y los grupos de autodefensa
Sootoro, formados principalmente por cristianos sirios y asirios, que
el 11 de enero se enfrentaron entre sí por la toma de un puesto de
control. En esa ocasión, el ataque curdo contra
el puesto de control presidiado por milicianos Sootoro provocó un
tiroteo, que duró una hora, y en el que murió el militante asirio David
Gabriel y algunos soldados curdos fueron heridos.