Baghdad, IRAQ (Agencia Fides, 08/07/2016) - El terrorismo “no tiene nada que ver con la
religión, pero puede ser conectado a los juegos políticos que le
permiten matar a musulmanes, cristianos, mandeos y yazidis como
'infieles'”. Lo ha dicho el patriarca caldeo Louis Raphael I este jueves
7 de julio al dirigirse a los participantes en la vigilia de oración en
la parroquia caldea en Karrada, distrito de Bagdad, donde el domingo
unos terroristas suicidas provocaron una de las más terribles masacres
de la historia iraquí. El ataque, reivindicado por los yihadistas del
estado islámico (Daesh) ha costado la vida a más de 300 personas,
marcando de forma trágica el final del Ramadán, el mes sagrado que los
musulmanes dedican al ayuno y la oración.
En su discurso, cuyo texto hemos recibido en la Agencia Fides, el
primado de la Iglesia caldea ha expresado su tristeza y pesar a los
familiares de las víctimas, condenando “estos actos crueles que atacan a
personas inocentes, robando la felicidad de los que se preparan para
celebrar el 'Eid al-Fitr, convirtiendo la fiesta en un duelo nacional”.
Todo el mundo debe reconocer que “matar a gente inocente conduce al
infierno y no al cielo”, ha dicho el patriarca caldeo, en referencia al
lavado de cerebro practicado por las agencias terroristas para reclutar
obreros listos para cometer atentados suicidas. “Si el gobierno fuese
coherente y los políticos trabajasen en equipo”, ha añadido el
patriarca, “el Daesh no sería capaz de: cometer estos crímenes, y poner
en peligro la seguridad y la estabilidad del país”.