Jerusalén, TIERRA SANTA (Agencia Fides, 07/07/2016) - El proyecto de remoción de minas de la zona
de Qasr al-Yahud, que se extiende alrededor de la orilla oeste del río
Jordán, a la altura del lugar que la tradición identifica como el lugar
del bautismo de Jesús, tendrá una duración de dos años y requerirá del
uso de al menos 4 millones de dólares. Por esta razón, la Halo Trust,
una compañía británica especializada a la que se han encargado los
trabajos de recuperación, ha puesto en marcha una suscripción para
financiar el proyecto, dirigida especialmente a las Iglesias y
comunidades cristianas de todo el mundo.
Qasr el-Yahud, a pocos kilómetros de la ciudad de Jericó, se encuentra
en los territorios palestinos ocupados por Israel en 1967, justo en la
frontera con Jordania. El área incluye antiguas iglesias y monasterios
hasta ahora consideradas peligrosos debido a las minas diseminadas en la
zona al tiempo de la Guerra de los Seis Días (5-10 de junio de 1967).
El área en proceso de ser recuperada cubre alrededor de 100 hectáreas.
En un primer momento se anunció que los trabajos de limpieza de minas
terminarían para finales de 2016. La limpieza de los campos minados -
subrayan los directivos de la empresa en los comunicados de prensa para
lanzar la suscripción - permitirá a los lugares de culto en la zona, que
pertenecen a la Iglesia Católica, a la Iglesia copta, a la Iglesia
sirio ortodoxa y a varias Iglesias ortodoxas – el ser restaurados para
dar cabida a las liturgias y ofrecer cuidado pastoral a los cientos de
miles de peregrinos que podrían volver a visitar el lugar.
La compañía especializa en la eliminación de minas y restos explosivos
de guerra también ha mencionado las muestras de apoyo recibidas por
parte de algunos líderes de las iglesias y comunidades cristianas, entre
ellos el padre Pierbattista Pizzaballa OFM, ex custodio de Tierra Santa
y recientemente nombrado administrador apostólico de la sede vacante
del Patriarcado Latino de Jerusalén. “Estamos a la espera del día en
que, gracias a la Halo Trus, podamos volver a celebrar con seguridad el
sacramento del bautismo”, dice el padre Pizzaballa entre otras cosas, en
una declaración concedida cuando era custodio de Tierra Santa.