Kinshasa, REPÚBLICA DEMOCRÁTICA DEL CONGO (Agencia Fides, 21/02/2017) - “Se esta incrementando el miedo, la ira, la
incertidumbre”, dice el cardenal Laurent Monsengwo Pasinya, arzobispo de
Kinshasa, capital de la República Democrática del Congo, en un mensaje
enviado a la Agencia Fides, en el que denuncia los ataques a la Iglesia
ocurridos en los últimos días.
“Hemos sabido con indignación, que el sábado 18 de febrero, un panda de
inciviles dieron fuego a una parte del Seminario Mayor de Malole y
después propagaron el pánico entre las hermanas carmelitas en Kananga”, escribe el cardenal, que también recuerda los
otros tres acontecimientos que se han producido este mes (7, 10 y 11 de
febrero) delante del arzobispo de Kinshasa, por parte de grupos de
jóvenes que “han creado una atmósfera de pánico”.
Tras estos episodios se produjo la profanación de la parroquia de Santo
Domingo de Limete por parte de unos “veinte jóvenes malintencionados”
que han “tirado por el suelo el tabernáculo, saqueado el altar, roto los
bancos, hasta llegar a tratar de prender fuego a la iglesia. La
comunidad de los Padres Oblatos ha sufrido el ataque”.
El Card. Monsengwo conecta estos hechos con el intento de la Conferencia
Episcopal del Congo (CENCO) de mediar en la aplicación de los acuerdos
de San Silvestre y de encontrar un primer
ministro que conduzca un gobierno de unidad nacional, según lo previsto
por los acuerdos.
“La CENCO tiene sólo un papel como mediador”, recuerda el cardenal. “Los
políticos deben reconocer con humildad que son sus ambiciones políticas
las que ponen en punto muerto y bloquean las instituciones. Ellos
tendrán que asumir su responsabilidad ante la historia”.
Después de llamar a las autoridades a proteger los bienes de la Iglesia
ante cualquier otro acto de vandalismo, el cardenal concluye recordando
Etienne Tshisekedi, el líder histórico de la oposición fallecido
recientemente, que luchó hasta el final por dar
a la RDC “una paz con justicia”.