Santo Domingo, REPÚBLICA DOMINICANA (Agencia Fides, 25/02/2017) - “Adolescentes y jóvenes en la realidad
dominicana” es el título del mensaje que la Conferencia Episcopal de la
República dominicana ha publicado con motivo del 173 aniversario de la
fiesta de la independencia, que se celebra el 27 de febrero.
Queremos compartir con todos algunas inquietudes sobre la realidad de
los adolescentes y jóvenes” escriben los obispos en el mensaje que
también hemos recibido en la Agencia Fides. Deteniéndose a describir la
situación: el 36.3% de la población dominicana, está compuesto por
jóvenes en edades que oscilan entre los 10 y los 29 años, y en ellos se
descubren muchos valores que dan alegría y esperanza para el futuro,
como el compromiso en el estudio, la disponibilidad a crear ocasiones
festivas y de alegría, incluso en las dificultades actuales, la
tendencia a reunirse valorando la amistad, además muchos jóvenes
trabajan demostrando una gran creatividad y sentido de la iniciativa
empresarial.
“Nuestros jóvenes, en su mayoría, son generosos y solidarios en sus
comunidades” subrayan los obispos. Numerosos jóvenes buscan al Señor en
la Iglesia y en otras Comunidades Cristianas con amor y entusiasmo,
formando parte de los grupos juveniles, en comunidades, en los coros, en
la catequesis, en la liturgia, en el servicio social... han aumentado
las vocaciones de los jóvenes al ministerio sacerdotal y a la Vida
Consagrada, como en los diferentes ministerios y servicios laicales. “A
pesar de las desigualdades sociales, económicas y culturales que existen
entre nosotros, un número elevado de familias apoyan a sus hijos en sus
estudios, y en su desarrollo humano y cristiano, aún en medio de
grandes precariedades”.
Luego los obispos se detienen al constatar “con tristeza y
preocupación”, una serie de situaciones dolorosas. Un gran número de
adolescentes y jóvenes nacen y crecen en hogares disfuncionales, sin una
figura paterna o materna que los guíe, con un alto nivel de
agresividad. La pobreza que azota al 40% de los hogares dominicanos,
crea grandes desigualdades y escasas oportunidades para estudiar y
progresar en la vida. Escasean los líderes sociales y políticos que
sirvan al pueblo en vez de lucrarse de los bienes comunes de la nación y
que hacen de la corrupción un modo de vivir . Los jóvenes encuentran
pocos espacios de diversión sana donde recrearse, mientras que por el
contrario, se les ofrece la droga, los juegos ilícitos, el sexo fácil a
edad temprana, la pornografía, la prostitución; cosas que tristemente
cautivan a muchos y los llevan a la destrucción de sus vidas. Ha crecido
el número de jóvenes desempleados, que son el 28,7% entre los 15 y 24
años
, al que
se añade el 19,7% entre los 15 y 24 años ni trabaja ni estudia. “Es
alarmante que adolescentes y jóvenes se vean cada vez más envueltos en
actos de violencia, atracos, asaltos, homicidios y todo tipo de
delincuencia, impulsados por el consumo y tráfico de droga y el ideal de
un enriquecimiento fácil, teniendo como paradigma a políticos corruptos
y narcotraficantes”. El mensaje también denuncia el mal uso de los
medios de comunicación social y de las redes sociales… mientras crece el
número de cuantos se declaran sin religión o participan en grupos
esotéricos o sincretistas.
A continuación los obispos lanzan un llamamiento: “Después de haber
visto la realidad de nuestros adolescentes y jóvenes, invitamos a las
familias, a la sociedad, a las autoridades y a toda la Iglesia, a hacer
una opción preferencial por nuestros adolescentes y jóvenes. El
acompañamiento, el sentido de familia, la calidad de la educación, los
sabios principios de la Biblia, la comunidad cristiana y la sociedad
serán imprescindibles para que nuestros adolescentes y jóvenes puedan
asumir responsablemente la vida como una llamada y como una misión”.
Tras dirigir una serie de exhortaciones a las familias, a la Sociedad, a
las autoridades y a los miembros de la Iglesia, en la conclusión los
obispos animan a los jóvenes a “asumir el protagonismo de su propia vida
y vocación” y a “saber encarnar los valores del Evangelio siguiendo las
huellas de nuestros padres, cumpliendo con los deberes ciudadanos,
respetando las leyes, honrando a la Patria con sus símbolos, héroes y
heroínas, y contribuyendo a la preservación del medio ambiente. Sean
valientes. ¡Atrévanse a proyectar un mundo mejor!”.