Nong Bua Lamphu, TAILANDIA (Agencia Fides, 03/10/2018) - Los misioneros de la Sociedad del
Verbo Divino (Verbitas), junto con voluntarios laicos, están
comprometidos en ayudar, dar dignidad y ofrecer nuevas esperanzas a los
pacientes con SIDA. Como recoge la Agencia Fides, el Centro para la
lucha contra el SIDA “Madre del Perpetuo Socorro”, ubicado en Nong Bua
Lamphu, en el noreste de Tailandia cerca de la frontera entre Tailandia y
Laos, ofrece una vida digna a las personas afectadas por el VIH y el
SIDA. El misionero Verbita Truong Thong Le recuerda en una entrevista
con Fides que fue el obispo George Yod Phimphisan, C.SS.R de la diócesis
de Udon Thani (ahora fallecido), quien, en 1998, confió a la Sociedad
del Verbo Divino en Tailandia la gestión del Centro de Asistencia a
pacientes con SIDA. Dos misioneros comenzaron a trabajar en 2000. Ahora
hay 12 Verbitas de distintas nacionalidades operando en el país
(vietnamita, indonesio, indio, estadounidense y alemán).
La pobreza extrema, el aislamiento y la estigmatización son factores que
dificultan mucho la vida de los pacientes con SIDA en el noreste de
Tailandia. “Tenemos muchos niños huérfanos, infectados por el VIH, hijos
de padres que murieron por la enfermedad”, indica el padre Thong Le.
Desde 1997, el Centro “Madre del Perpetuo Socorro” ha asistido a recién
nacidos y niños afectados por el VIH, en su mayoría de familias pobres.
Comenzó con unos 40 niños y ha crecido para ayudar a unas 400 personas
cada año. “Una de las prioridades del Centro es el programa especial de
educación y concienciación sobre el SIDA que llevamos a cabo en unas 20
escuelas cada año”, concluye Verbita.