Dushanbe, TAYIKISTÁN (Agencia Fides, 23/08/2019) – “El equipo de Cáritas Tayikistán ha revisado
su plan estratégico para el período 2016-2019. Estamos en los últimos
meses del período de tres años y esta verificación ha servido para
evaluar los objetivos establecidos. La revisión demostró que, en
general, Cáritas Tayikistán ha llevado a cabo las actividades del plan
de los últimos cuatro años: se puede decir que el 79% de estas
actividades se completaron, el 13% no se completaron y el resto está en
curso. Teniendo en cuenta esta verificación y el nuevo marco
estratégico, Cáritas Tayikistán desarrollará su nuevo plan para el
período 2020-2024”. Esto es lo que asegura la nota enviada a Fides por
Cáritas en la que se hace un balance del trabajo de la organización en
el país de Asia Central.
Las actividades de los últimos años se han desarrollado desde 2016 con
el apoyo de la Fondation Caritas Luxembourg y, en concreto, del
consultor Karl Amman.
En Tayikistán, la organización actúa en varios frentes: uno de los
principales proyectos es la distribución de agua en el distrito de Jomi,
una zona al oeste del país, donde las condiciones del suministro de
agua representan un emergencia para la población. Los voluntarios
también trabajan para la reintegración en la sociedad de personas sin
hogar de la capital Dushanbe: “Las personas sin hogar son un fenómeno
relativamente nuevo, apareció en la sociedad como resultado del ingreso
en la economía de mercado emprendido por el país”, se lee en el
comunicado. Los destinatarios de este proyecto tienen asistencia
garantizada y apoyo psicológico y burocrático para facilitar el proceso
de reintegración social.
Además, se llevan a cabo numerosas actividades para proporcionar medios
de vida a las personas con discapacidad. Además el proyecto “Supervision
for success” permite a los ancianos enseñar artesanías a niños
huérfanos.
La presencia católica en Tayikistán se remonta a la década de 1970. Los
primeros fieles eran en su mayoría alemanes de Rusia, Ucrania y
Lituania, deportados al país cuando existía la Unión Soviética. Debido
al régimen comunista, durante años las comunidades de Tayikistán
estuvieron completamente aisladas de la Iglesia universal. Juan Pablo II
estableció en 1997 la Missio sui iuris. En 1983 comenzó la actividad
caritativa llevada a cabo por pequeños grupos que se fusionaron
oficialmente en Cáritas a partir de 2004.