Bujumbura, BURUNDI (Agencia Fides, 21/09/2016) - En Burundi, desde el 26 de abril de 2015
hasta finales de agosto de 2016 han sido documentados por la ONU 564
ejecuciones extrajudiciales. Así lo señala el informe de la misión de
investigación de las Naciones Unidas encargada de investigar las
violaciones de los derechos humanos en el país africano.
“Los expertos han constatado graves violaciones de los derechos humanos
que han sido y están siendo cometidas principalmente por agentes del
Estado y por aquellos que están relacionados con ellos”, afirma el
informe, con una clara referencia a las milicias progubernamentales. El
informe no descarta que los graves violaciones de los derechos humanos
puedan constituir crímenes contra la humanidad, y pide que se de inicio
de los procedimientos judiciales internacionales para llevar ante la
justicia a los responsables.
“Las graves violaciones son sistemáticas, la impunidad está omnipresente
y el peligro del crimen de genocidio es alto”, según se lee en el
informe, enviado a la Agencia Fides.
El gobierno de Bujumbura ha calificado el informe de la ONU como
“distorsionado y orientado políticamente”. La crisis política de Burundi
estalló tras el anuncio, en abril de 2015, del presidente Pierre
Nkurunziza en el que declaraba su candidatura para un tercer mandato, en
violación de la Constitución y de los acuerdos de paz de Arusha, que
prevén dos mandatos presidenciales. Después de la elección de
Nkurunziza, en julio de 2015, la violencia y la represión ha empeorado,
empujando a más de 300.000 burundeses a buscar refugio en los países
vecinos.