CIUDAD DEL VATICANO (http://press.vatican.va - 15 de febrero de 2017).-
Esta mañana en la Oficina de Prensa de la Santa Sede ha tenido lugar
la presentación del III Premio Internacional “Economía y Sociedad” de la
Fundación “Centesimus Annus-Pro Pontifice” (para promover el
conocimiento de la Doctrina Social de la Iglesia Católica y del Congreso
Internacional “Constructives alternatives in an Era of Global Turmoil”.
Los galardonados son: del Premio Internacional, el aleman Markus Vogt por su obra Prinzip Nachhaltigkeit. Ein Entwurf aus theologisch-ethischer Perspektive,
Munich 2013 y del Premio a los periodistas, instituido este año, el el
religioso asuncionista francés, Dominique Greiner por su blog "La doctrine social sur le fil", publicado en la página web del diario "La Croix" y el alemán Burkhard Schäfers, por su programa radiofónico "Oswald von Nell-Breuning - Was ist von der katholischen Soziallehre geblieben.
El premio se otorgará el 18 de mayo en el romano Palazzo della
Cancelleria, en el contexto del congreso internacional anual de la
Fundación Centesimus Annus-Pro Pontifice “Constructives alternatives in
an Era of Global Turmoil”.Job creation and human integrity in the
digital space- incentives for solidarity and civic virtue”, que tendrá
lugar en el Aula Nueva del Sínodo en el Vaticano y en el Palazzo della
Cancelleria del 18 al 20 de mayo próximos.
Han intervenido el Cardenal Reinhard Marx, Arzobispo de Munich y
Friesing y el Presidente de la Fundación Centesimus Annus Pro Pontifice,
Domingo Sugranyes Bickel.
El Cardenal Marx, Presidente del jurado del Premio "Sociedad y Economía, ilustró
los motivos del galardón al que se han presentado esta vez más de 57
obras procedentes de 12 países de los cinco continentes y explicó que
con la institución del premio a los periodistas ese organismo quería
reconocer la importancia de esa profesión en la difusión de la Doctrina
Social de la Iglesia y sus ganadores han sido:
“El profesor Markus Vogt -dijo- ha trabajado durante varios años
como experto de ecología para el gobierno alemán y de 1998 a 2007 fue
profesor de Ética social cristiana en la Universidad
filosófico-teológica de los Salesianos en Benediktbeuern. Actualmente es
profesor de la misma materia en la Universidad de Münich. Desde hace
más de 20 años se ocupa de sostenibilidad y se puede considerar uno de
los principales expertos en este tema, que ocupa también un lugar
importante en la encíclica del Papa FRANCISCO Laudato sí”.
“El principio de la sostenibilidad no es ajeno a la economía tradicional –continuó-
Desde hace siglos, hay principios que tienen en cuenta las
consecuencias de la acción humana sobre el medio ambiente, por ejemplo
mediante la regulación del uso de los bosques y selvas. Las tecnologías
modernas, sin embargo, han aumentado nuestros potenciales y por lo tanto
las consecuencias de nuestras acciones en el mundo, por lo cual los
problemas de hoy en día han adquirido un alcance mucho más amplio y
requieren un replanteamiento global”.
En su libro, Markus Vogt “propone repensar los vínculos entre tres
dimensiones esenciales de la vida humana que son interdependientes: la
economía, la ecología y la social. A largo plazo la economía no puede
prosperar sin un medio ambiente sano y sin resolver el problema de la
pobreza. Pero esto es igualmente cierto para las otras dos dimensiones:
será imposible salvaguardar el medio ambiente sin una economía que
funcione y sin ofrecer a todas las personas la oportunidad de
desarrollar sus dones, así como no se podrá hacer frente al problema de
la pobreza con una economía débil y sin cuidar el medio ambiente”.
Para Vogt un ejemplo de sociedad donde la ecología, la economía y
los asuntos sociales estaban bien coordinados era la sociedad judía del
Antiguo Testamento. Era una sociedad en la que hombres, respetando
determinadas disposiciones relativas al medio ambiente y a los pobres
(por ejemplo respetar el año sabático en que los campos se mantenían en
barbecho y se perdonaban las deudas), eran capaces de obtener de un
terreno de por sí pobre víveres suficientes para evitar, durante varios
siglos, las hambrunas periódicas en otros lugares.
Por lo tanto, según el autor, “ no se pueden resolver los enormes
problemas que enfrenta el mundo hoy en día de forma individual. Vogt
rechaza la visión que haría de la ecología una nueva doctrina de la
salvación. En el centro de la Doctrina Social de la Iglesia no está el
medio ambiente, sino la persona y el medio ambiente se hace crucial, en
cuanto la persona lo necesita. Por lo tanto sirve un pensamiento
complejo, capaz de iluminar los vínculos entre los diversos problemas.
Así, en su libro, Vogt aborda el tema de la sostenibilidad desde
diferentes perspectivas, éticas, teológicas, científicas, sociológicas e
incluso políticas. El reto es encontrar una nueva forma de pensar que
asuma esa responsabilidad también para las generaciones futuras (el
principio de "solidaridad") y que no considere la naturaleza
simplemente como la suma de los recursos útiles a la producción
industrial, sino como creación, es decir, como don”.
“Es cierto –dijo el Cardenal- que la política tiene un papel clave en
la solución del problema ecológico y hay que reforzar de alguna manera
también la capacidad de las instituciones internacionales. Pero no se
trata solo de un problema exclusivamente politico. De hecho, Vogt hace
hincapié en la importancia del principio de subsidiariedad, evidenciando
que se pueden dar muchos pasos en ámbito local por parte de organismos
intermedios que dan expresión a la sociedad".
“¿Cuál es el papel de la Iglesia en la búsqueda de la
sostenibilidad?” -se preguntó el Arzobispo de Munich. Vogt propone
–dijo-que se acepte la sostenibilidad como uno de los principios
fundamentales de su Doctrina social, junto a los de la personalidad, la
solidaridad y la subsidiariedad. De hecho, considera la sostenibilidad
como un desarrollo para nuestro tiempo del principio tradicional del
bien común”.
“En resumen: la lectura del libro de Vogt -concluyó- es una
experiencia enriquecedora. No tiene la intención de defender una manera
unilateral de pensar, pero sabe cómo tomar posiciones equilibradas
frente a las posiciones radicales. Y logra también indicar algunas
formas concretas para mejorar nuestro mundo”.
Por cuanto respecta a los periodistas galardonados el Padre
Dominique Greiner ha enseñado Teología moral, política y social en las
Facultades de Teología del Instituto Católico de Lille en París, y es
jefe de redacción del diario "La Croix" . El blog premiado "La doctrine social sur le fil", se
abrió en 2013 y está especializado en Doctrina Social de la Iglesia.
Actualmente cuenta con más de un centenar de artículos publicados en
los últimos años en el diario "La Croix" divididos en seis grandes
áreas: 1) Ecología y modos de vida; 2) Pobres y los emigrantes; 3)
Economía, mercado, empresa y empleo; 4) Política y bien común; 5) La
guerra, la paz, el terrorismo y 6) varios. El blog aprovecha las
posibilidades de Internet para ofrecer a aquellos que quieren cultivar
su interés en la Doctrina Social de la Iglesia una herramienta muy rica y
valiosa con miras a "un mundo más justo, más fraterno y solidario.
El segundo galardonado, Oswald Schäfers, trabaja en las radios
públicas de Münich (Deutschlandfunk y Deutschland Radio Kultur), así
como en diversos periódicos y medios de comunicación on line y es
director del Institut zur Förderung publizistischen Nachwuchses
(Instituto para la promoción de nuevas generaciones de publicistas).
Recibe el premio por su programa radiofónico sobre Oswald von
Nell-Breuning (1890-1991), uno de los grandes protagonistas de la
doctrina social de la Iglesia del siglo XX. Von Nell-Breuning fue uno de
los principales autores de la Quadragesimo anno de Pío XI en
1931. Durante su larga vida reconoció la necesidad de partir de los
hechos, más que de las normas, para comprender la realidad social.
Durante el programa, varios entrevistados ilustraban los principios de
la subsidiariedad, la personalidad y la solidaridad y concluía con
algunas reflexiones sobre la importancia de la Doctrina social de la
Iglesia en Alemania de nuestro tiempo.
Por su parte el presidente del Consejo de Administración Domingo
Sugranyes Bickel informó de que el congreso internacional anual de la
Fundación CAPP se llevará a cabo en el Vaticano del 18 al 20 mayo 2017,
con el siguiente tema: “Alternativas constructivas en una época de
incertidumbre mundial: Empleo e integridad en la era digital. Incentivos
a la solidaridad y la virtud cívica”.
“El congreso –afirmó - contará con la presencia de unos 250
profesionales, empresarios, líderes sindicales, políticos, académicos y
expertos de la doctrina social de la Iglesia. Se basará en el trabajo en
varias conferencias regionales y consultas de expertos internacionales,
y utilizará los informes preparados por los grupos locales y miembros
del CAPP en 19 países diferentes”.
Después ilustro el trabajo llevado a cabo por la Fundación en los últimos 24 meses que se ha centrado en los siguientes temas:
• Iniciativas empresariales en la lucha contra la pobreza, con los
informes presentados a la Conferencia Internacional (Vaticano, mayo de
2016) y la Conferencia EE.UU.-CAPP / Universidad de Fordham (Nueva York,
septiembre de 2016).
• Una economía digital para el bien común, con especial atención al
futuro del empleo (Asamblea de los miembros italianos de la Fundación en
la sede de La Civiltà Cattolica, en noviembre de 2016) y Efectos
culturales, organizativos y éticos de la digitalización (CAPP /
Universidad Pontificia Comillas / BBVA, cuarta consulta del "Proceso de
Dublín", Madrid, enero de 2017),
• Nuevas alianzas y diálogo ético en la realización de reformas
económicas inclusiva (Conferencia Internacional CAPP, Vaticano, mayo de
2016).
La documentación de estas reuniones está disponible en el sitio web
CAPP www.centesimusannus.org y en diversas publicaciones . Sus
actividades obedecen a los objetivos de la Fundación CAPP definidos por
su fundador San Juan Pablo II: Promover entre las personas
cualificadas en la sociedad por su compromiso empresarial y profesional
el conocimiento de la doctrina social cristiana, y la información sobre
las actividades de la Santa Sede. También responden al apremiante
mensaje que dirigió a la Fundación el Papa FRANCISCO “Espero que
vuestra conferencia contribuya a generar nuevos modelos de progreso
económico orientados de manera más directa al bien común, la inclusión y
el desarrollo integral, el aumento del trabajo y la inversión en
recursos humanos ".
Los miembros de la Fundación, que deben ser católicos, se
comprometen a profundizar en el conocimiento de la doctrina social
católica y a difundir en su entorno profesional las conclusiones
alcanzadas dentro de la Fundación. El Grupo de Amigos de la Fundación,
creado recientemente por el Consejo de Administración, también permite a
los no católicos la colaboración en sus actividades. La Fundación
siempre ha tratado de mantener el debido rigor en sus tareas de
investigación académica y ética en confrontación con la experiencia
concreta de la gestión económica. El Consejo está asistido en su labor
por un Comité científico y colaboradores eclesiásticos.
La actividad de la Fundación se financia con las cuotas anuales y los
donativos. El rédito del patrimonio le permite contribuir con un
donativo anual a las obras de caridad del Santo Padre. La cantidad
donada al Santo Padre y a las instituciones de la Santa Sede por él
indicadas asciende a más de 2 millones de euros en los últimos siete
años. Los balances certificados están disponibles en el sitio web de la
Fundación.