Kandhamal, INDIA (Agencia Fides, 07/08/2018) - Se cumplen ya 10 años de la masacres
anticristianas ocurridas en Orissa en 2008. Se trata de la mayor ola de
violencia contra los creyentes en la historia del país. Hoy, la
población del distrito de Kandhamal, en el estado de Orissa, necesita
atención y pide justicia.
"Esperamos que recuerden el genocidio que tuvo lugar en Orissa en 2008.
Apenas ocho días después de la celebración del día de la Independencia,
India fue testigo del ataque más grande contra una comunidad religiosa
de su historia. Por eso, desde 2009, todos los 25 de agost los
cristianos Kandhamal conmemoran a las víctimas", señala el equipo del
Foro Nacional de Solidaridad, una red de más de 70 organizaciones de la
India, incluyendo activistas, sacerdotes, abogados, y personas de fe
cristianos e hindú.
Según los datos enviados a Fides por el Foro Nacional de Solidaridad,
durante la ola de violencia, 393 iglesias y lugares de culto cristianos
de los adivasis y los dalits fueron destruidos, unas 6.500 viviendas
fueron arrasadas, más de 100 personas fueron asesinadas y más de 40
mujeres fueron víctimas de violación, de acoso y de humillación,
mientras que varias instituciones educativas, sociales y sanitarias
fueron saqueadas. Más de 12.000 niños perdieron la oportunidad de tener
una educación. Más de 56.000 personas se vieron obligadas a huir de
Kandhamal y a refugiarse en los bosques. Se reportaron también varios
casos de conversión forzosa al hinduismo, llevadas a cabo por
extremistas hindúes del grupo "Sangh Parivar". Los desplazados de
Kandhamal ahora están dispersos en diferentes partes del país. Muchos de
ellos no pueden regresar a sus aldeas y se vieron obligados a
reconstruir sus vidas, consiguiendo casa y trabajo fuera del distrito
donde nacieron.
"Es importante destacar que las personas de Kandhamal no han reaccionado
en forma violenta. Después de diez años de violencia y de abusos, los
supervivientes de Kandhamal todavía están luchando por la paz, la
justicia y la armonía", indica el Forum en una nota enviada a Fides.
Como denuncia también la Iglesia católica en Orissa, la compensación que
el Gobierno dio a las víctimas y a los supervivientes de Kandhamal fue
mínima. Hubo más de 3.300 denuncias, pero son solo 820 casos fueron
llevados a la corte, de los cuales solo 518 fueron declarados como
admisibles por el Tribunal. De estos 518 casos, 247 fueron archivados,
sin que reconociera ningún culpable, debido a la falta de pruebas o de
testigos. El resto de los casos todavía está pendientes en tribunales de
primera instancia, mientras que muchos procesos han sido resueltos con
una sentencia absolutoria. Considerando las denuncias iniciales, solo el
1% de los casos ha tenido una conclusión procesal.
El 2 de agosto de 2016, una decisión de la Corte Suprema reconoció que
la cantidad y el alcance de las indemnizaciones no eran satisfactorios
para las víctimas de Kandhamal. “Por lo tanto, aquellos que han sido
excluidos de la lista de compensación deben ser incluido inmediatamente.
Esto incluye la compensación a las familias de quienes murieron, la
compensación por la destrucción de hogares y de bienes, la compensación
por los edificios y las iglesias, así como la compensación a las
instituciones y las ONG”, sostiene el Forum.
El Alto Tribunal ha encontrado desconcertante el hecho de que 315 casos
de violencia hubiesen sido archivados y ha pedido al gobierno regional
que los volviera a examinar. Pero este proceso no ha sido todavía
activado. Para garantizar la justicia a los supervivientes de la masacre
de Kandhamal, el Foro Nacional de Solidaridad solicita un grupo de
trabajo que monitoree los casos y los procesos, la protección de los
testigos contra la intimidación y una investigación libre y justo para
reabrir casos archivados.
“Actualmente ninguno de los criminales responsables de la violencia está
en prisión. Los asesinos, los violadores y los saqueadores andan
sueltos, mientras que siete cristianos inocentes todavía están presos
injustamente, condenados por el asesinato de un líder hindú”, asegura el
Foro Nacional de Solidaridad, que, conjuntamente con la Asociación de
Sobrevivientes de Kandhamal lanzan un llamamiento "a todos los que creen
en el secularismo, la democracia, la justicia, la paz y la armonía,
para que se observe un día por las víctimas de Kandhamal, el próximo 25
de agosto de 2018 o el 29 de agosto, en Bhubaneshwar, en presencia de
más de 10.000 personas.
En el marco de la conmemoración, en los distintos eventos, se pedirá
apoyo y justicia para las víctimas, a través de la identificación de los
autores y de la reconstrucción de las casas y de las iglesias
destruidas. También se ha llamado a instituir una “Comisión para las
minorías de Orissa” para "evitar decisiones sesgadas y para garantizar
la toma de decisiones armoniosa y participativa, hacia los ciudadanos
sin distingo de la fe que profese", dice el comunicado.