Ankara, TURQUÍA (Agencia Fides, 03/04/2020) – Las fundaciones turcas encabezadas por
comunidades religiosas minoritarias se están preparando para participar
en la colecta de donaciones lanzada por el presidente Recep Tayyip
Erdogan como "Campaña Nacional de Solidaridad" para acumular los
recursos necesarios para contrarrestar la propagación de la pandemia de
coronavirus en Turquía. El hebreo Moris Levi, representante de las
Fundaciones de las comunidades religiosas minoritarias dentro de la
Asamblea Nacional de las Fundaciones turcas, dijo a los medios de
comunicación turcos que todo el sector de las Fundaciones que él
representa, sin excepción, ya ha tomado medidas para responder
rápidamente a la petición de solidaridad concreta expresada por el
presidente turco, mientras que Isaak Haleva, rabino jefe de la comunidad
hebrea en Turquía (en la foto junto con Erdogan), ya ha anunciado que
donará el equivalente de cinco meses de su salario personal a la campaña
de donación.
El 30 de marzo, Erdogan lanzó la "Campaña Nacional de Solidaridad" para
apoyar la lucha contra el nuevo coronavirus, realizada bajo consignas
destinadas a afirmar la "autosuficiencia" de Turquía en esta batalla.
Erdogan inauguró la colecta de donaciones anunciando que había donado el
equivalente a siete meses de su salario personal a la campaña, y
subrayando que la iniciativa pretende apoyar sobre todo a aquellos que
en la vida diaria tienen más problemas económicos, comenzando por los
trabajadores que están perdiendo el salario. Otros miembros del gobierno
también se unieron a la campaña con una donación total de 5,2 millones
de liras turcas (equivalente a 791 mil dólares).
En las últimas semanas, entre las teorías de conspiración que circulan
en los medios de comunicación turcos sobre la pandemia, destacan las de
Fatih Erbakan, líder del movimiento Yeniden Refah Partisi, según el cual
y en su opinión, "aunque no hay evidencia concreta, el sionismo podría
estar detrás del coronavirus".
A principios de marzo, la oficina de comunicación
del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, envió a las fundaciones una
petición para que firmasen un documento de apoyo incondicional al
gobierno y al ejército turco, en un momento en que el organismo militar
turco llevaba a cabo sus operaciones en los escenarios del conflicto en
curso en la provincia siria de Idlib.
Más de 40 pueblos y barrios del país están en cuarentena debido a la
epidemia. Según las cifras oficiales proporcionadas por las autoridades
turcas, a finales de marzo los casos confirmados de personas infectadas
con coronavirus eran de alrededor de 11 mil, con menos de 800 pacientes
en cuidados intensivos.
La campaña de donación lanzada por Erdogan fue duramente criticada por
representantes de la oposición. Meral Akşener, fundador del Partido Iyi,
ha invitado polémicamente al presidente turco a agregar a sus
donaciones el avión que le regaló el emir de Qatar.
En Turquía, las aproximadamente 170 fundaciones vinculadas a minorías
étnicas y religiosas presentes en el país, incluidas las animadas por
judíos y cristianos armenios, griegos, asirios, sirios, caldeos,
búlgaros y georgianos, actúan de acuerdo con las disposiciones y
regulaciones definidas por la Dirección General de las Fundaciones. En
los últimos años, estos organismos se encuentran en una situación de
incertidumbre e inquietud institucional: en 2013 se estableció una nueva
regulación para redefinir las relaciones de las Fundaciones con los
aparatos gubernamentales y su funcionamiento interno, pero esta
regulación nunca entró en vigor, impidiendo la renovación de los puestos
ejecutivos de las instituciones.