Damasco, SIRIA
(Agencia Fides, 30/07/2014) - El sangriento conflicto en Siria no se
detendrá hasta que los actores internacionales dejen de alimentarlo
con la venta de armas. Y cualquier intento serio de poner fin a la
violencia sin sentido que asola el país desde hace más de tres
años, solo puede nacer de la promoción de las negociaciones
políticas serias y de la interrupción del flujo de armas de varias
fuentes que siguen suministrando armas a los frentes opuestos. Estas
son las consideraciones que hace en un llamamiento Pax Christi
Internacional para llamar a la comunidad y a los organismos
internacionales a cumplir con las medidas e iniciativas para combatir
a aquellos que siguen subvencionando el conflicto con la canalización
de instrumentos de muerte en Siria. “Los actores internacionales,
entre ellos los gobiernos”, se lee en el texto enviado a la Agencia
Fides “están alimentando el conflicto armado mediante la
financiación y provisión de armas y municiones, adiestrando a los
combatientes e incluso enviando fuerzas militares para ayudar a uno o
más contrincantes. Algunos centros de análisis han realizado
esfuerzos para documentar el tráfico de armas, pero en general, se
registra un gran deficit en la asignación de responsabilidades en
esta materia”. Según Pax Christi, el comercio de armas ha
continuado durante el curso del conflicto, con niveles de
participación internacional que sugieren una “guerra de poder”
que combaten en Siria las potencias externas, globales y regionales.
Para aumentar las posibilidades de poner fin al conflicto sirio –
subraya Pax Christi Internacional en su llamamiento - el primer paso
a tomar es el de imponer a través del Consejo de Seguridad o la
Asamblea General de la ONU un embargo total sobre el flujo de armas
directo a Siria.