CIUDAD DEL VATICANO (Agencia Fides, 15/09/2016) – “Estamos trabajando mucho por las
victimas del terremoto: la Iglesia ha hecho un gran esfuerzo para
asistir a nivel humanitario y de conforto en la primera fase, que ha
finalizado hoy. Un año y medio después de la catástrofe que afectó al
país en la primavera de 2015, se está trabajando con esfuerzo en la
segunda fase, la de la reconstrucción, gracias a la labor de Caritas
Nepal, y con la ayuda de la red Cáritas de todo el mundo”: así lo
declara a la Agencia Fides el Obispo Paul Simick, Vicario Apostólico de
Nepal, en el marco del seminario de formación para los nuevos obispos
organizado por la Congregación para la Evangelización de los Pueblos,
que está celebrando en Roma.
“El proceso de reconstrucción tras el terremoto - dice el Obispo -
comenzó hace poco: hemos tenido que esperar los procedimientos descritos
en el documento fundamental del gobierno para la política de
rehabilitación y reconstrucción. Nos estamos centrando en casas,
escuelas, hospitales, gracias a la contribución de órdenes religiosas
como los jesuitas y los Salesianos, junto con muchas otras Ong no
católicas”.
“Para nosotros es una manera de dar testimonio del Evangelio en Nepal.
Muchas comunidades pobres, en zonas remotas, solo se fían de nosotros.
El 99% de los beneficiarios de nuestros programas de ayuda no son
católicos. Más que con la predicación, el Evangelio se dona con las
obras”, dice Mons. Simick.
“Queremos que nuestra presencia en Nepal sea creativa. La creatividad
apostólica es un don del Espíritu Santo. Queremos contribuir con la
sociedad de Nepal y lo hacemos principalmente a través de la educación y
las obras sociales, que llevamos a cabo desde hace más de 20 años”,
señala.
“La Iglesia en Nepal es una Iglesia joven, tiene sólo 62 años y cuenta
con el apoyo de seis congregaciones masculinas y 22 femeninas: en total
son 85 sacerdotes y 122 religiosas que trabajan en muchas áreas del
país. La gente tiene una buena opinión de nosotros, los católicos, un
pequeño rebaño de aproximadamente 8.000 fieles”, dice el Vicario
Apostólico de Nepal.