Kisumu, KENIA (Agencia Fides, 15/02/2018) – “Reconciliación para la convivencia y la
integración nacional. Justicia para todos”: es el tema de la Campaña de
Cuaresma de 2018, presentada por la Universidad de Uzima, en la
Arquidiócesis de Kisumu, según lo comunicado a la Agencia Fides.
“Reconciliación significa recomponer lo que ha sido separado, restaurar
las relaciones amistosas entre las partes o hacer que las comunidades
coexistan en armonía”, ha explicado Mons. Kivuva Martin, Arzobispo de
Mombasa y Presidente de la Comisión de “Justicia y Paz” del episcopado.
El arzobispo ha invitado a los kenianos a reconciliarse entre ellos “por
el bien de la convivencia y la integración nacional”, a superar las
diferencias étnicas y actuar “para restaurar la dignidad que está en
cada persona”.
“Como kenianos de diferentes orígenes, comunidades y
culturas, debemos reconocer que tenemos similitudes y diferencias
causadas por numerosos factores. Pero si nos enfocamos sólo en nuestras
diferencias, seremos condenados”, comenta Mons. Kivuva en una nota de
los obispos de África oriental, enviada a la Agencia Fides.
El Arzobispo también ha señalado que, como cristianos y creyentes,
Cristo es el punto de partida: “Su oración, para que todos sean uno (Jn
17,21) venía desde el fondo del corazón, mientras que sus apóstoles
discutían sobre cuál de ellos era el más grande”.
La campaña de Cuaresma se divide en temas semanales. El primero se
centra en el “buen gobierno” y cómo abordar la incompetencia y la
corrupción en las diferentes zonas del país en general. El tema de la
segunda semana habla de la “reconciliación”, mientras que la tercera
semana se enfoca en la juventud. La cuarta semana se refiere al tema de
la seguridad en la comunidad y la última se centra en la protección
infantil.
“Esta campaña es un evento nacional anual que reúne a los obispos, al
clero, a los religiosos, religiosas y fieles laicos de toda Kenia para
orar y prepararnos para entrar en la Cuaresma. También es un tiempo de
penitencia, ayuno y de compartir con los menos afortunados imitando a
Jesucristo, que dio su vida por la humanidad”, concluyen los Obispos.