Pekín, CHINA (Agencia Fides, 16/02/2018) – En 2017 en la China continental ha habido 48,556
nuevos bautizados. Las estadísticas publicadas por la “Faith Cultural
Society (Sociedad Cultural de Fe) en vísperas del Año Nuevo chino y
enviadas a la Agencia Fides “no son completas”, dice Faith, debido a la
falta de datos sobre las comunidades católicas que viven en las zonas
rurales más remotas, pero “refleja la vitalidad y el dinamismo misionero
de una comunidad que vive su fe en plenitud”.
Según los datos recibidos por la Agencia Fides, la provincia de He Bei,
bastión del catolicismo chino, por enésima vez ocupa el primer lugar con
sus 11.899 bautizados. Entre estos, la comunidad de Xing Tai ha
realizado 3.645 bautizados y la diócesis de Han Dan 3.059. Peor incluso
la distante comunidad de la provincia de Hai Nan ha realizado 38
bautizados. En la zona donde reside un gran número de musulmanes como la
administración autónoma de Xin Jiang (en el oeste de China), se han
registrado 66 bautismos, mientras en la provincia de Ning Xia 128 y
otros 54 más en Qing Hai. Incluso la pequeña comunidad católica en el
Tíbet, inmersa en el ambiente budista tibetano, ha recibido 11 nuevos
católicos. En la diócesis de Pekín han sido bautizados 1.099.
Según Faith Cultural Society, “a pesar de estas alentadoras cifras y del
gran compromiso misionero de las comunidades locales en toda China,
siempre debemos sentirnos llamados a renovar nuestro compromiso
misionero. La evangelización en China es un camino largo y difícil de
recorrer”. Al mismo tiempo, se afirma que las estadísticas publicadas
representan “una invitación y un llamamiento porque debemos fortalecer
nuestra fe y avanzar siempre en nuestro camino hacia Cristo”.
Para concluir Faith invita a todas las comunidades a mejorar y mantener
siempre en orden sus archivos y registros parroquiales, para poder dar
datos ciertos y mostrar claramente la historia de su comunidad, pero
también la de toda la Iglesia en China. Los datos sobre los bautismos,
concluye Faith, también son un modo de “ver el crecimiento de la Iglesia
y el trabajo de evangelización realizado por Cristo".