Roma, ITALIA (Agencia Fides, 22/02/2018) - La Iglesia en África se ha puesto en marcha para
acoger el llamamiento lanzado el 4 de febrero por Francisco, la
convocatoria, - el segundo viernes de Cuaresma de 2018, es decir, el 23
de febrero -, de una jornada de ayuno y oración por la paz en el mundo
y, en especial, en la República Democrática del Congo y en Sudán del
Sur.
En RDC, los obispos han elaborado un plan detallado que prevé para las
comunidades sacerdotales y religiosas, -además de la oración de la
liturgia de las horas y la misa del día-, el rezo del rosario; la
adoración eucarística en todas las parroquias; el Via Crucis; y una
oración ecuménica. Dejan libertad a cada diócesis para organizarse de
acuerdo a la relación que mantienen con otras confesiones cristianas.
Los capellanes de las escuelas están invitados a celebrar la misa o a
rezar el rosario, junto con alumnos y profesores, por la paz en la
República Democrática del Congo y en Sudán del Sur.
En Sudán del Sur, los obispos animaron a todos los fieles a unirse en
comunión con la oración del Papa Francisco. En la capital Juba, la
oración tendrá lugar en la catedral a partir de las 4 de la tarde del 23
de febrero. El arzobispo de Juba, monseñor Paulino Lukudu Loro, ha
invitado a participar en la oración a los fieles de otras denominaciones
cristianas y a musulmanes. Monseñor Erkolano Lodu Tombe, obispo de Yei,
ha explicado que en su diócesis ya ha comenzado la preparación
espiritual para la oración de mañana. El obispo espera que las oraciones
y el ayuno por la paz en su país y en la República Democrática del
Congo se prolonguen incluso después del 23 de febrero. También otras
Conferencias episcopales africanas se han sumado de lleno al llamamiento
del Papa Francisco, como la Conferencia Episcopal de Benin. Al concluir
su asamblea plenaria del 26 de enero, los obispos de Benin expresaron
su cercanía “emocional y espiritual con la Iglesia católica en la
República Democrática del Congo y con el pueblo congoleño, asegurando
sus oraciones para que Dios difunda la paz en esta nación herida por
tantos años de inestabilidad política”.
En Togo, que vive una situación de gran tensión política y que guarda
ciertas similitudes con el panorama congoleño, la Conferencia Episcopal
ha invitado a los fieles a estar en comunión con el Papa con motivo de
este día de oración, y ha pedido a los togoleses rezar a Dios por la
conversión de los corazones, especialmente los de aquellos que tienen en
sus manos la suerte de la República Democrática del Congo y de Sudán
del Sur y de los que están involucrados de una forma u otra en la
situación de estos países. La Conferencia Episcopal de Togo ha pedido
rezar también por Togo, donde acaba de iniciarse un proceso de diálogo
político para tratar de sacar al país de la crisis.
También los obispos de Costa de Marfil pidieron el 19 de febrero a todos
los sacerdotes, religiosos y fieles laicos hacer lo posible para vivir
este día en comunión con la Iglesia universal.
En Ghana, monseñor Philip Naameh, arzobispo de Tamale y Presidente de la
Conferencia Episcopal, con motivo de la visita de una delegación
electoral de la RDC, ha expresado la solidaridad de la Iglesia de Ghana
con los congoleños asegurando que en Ghana los católicos rezan además
por que las elecciones programadas para el 23 de diciembre en la RDC
sean pacíficas.
Al concluir los trabajos de la Asamblea Plenaria el 21 de febrero, los
obispos de Burkina Faso y Níger enviaron un mensaje de solidaridad a la
Conferencia Episcopal de la República Democrática del Congo por la
represión de las manifestaciones convocadas por el laicado católico para
exigir el pleno cumplimiento de los acuerdos de San Silvestre.