Kaslik, LÍBANO (Agencia Fides, 14/02/2018) - Las diferentes comunidades religiosas están
llamadas a promover una reflexión interna, para examinar sus propias
costumbres y reglas comunitarias, si quieren contribuir de forma
concreta a superar la práctica social de los “matrimonios precoces”. Es
la conclusión a la que se llegó en la conferencia del miércoles, 13 de
febrero, celebrada en la Universidad del Espíritu Santo de Kaslik
(USEK), y titulada “Proteger a los niños de los matrimonios precoces”.
El debate se basó en el proyecto de ley para “la protección de los niños
contra el matrimonio precoz”, presentado al Parlamento en marzo de 2017
por el diputado Élie Keyrouz, que tiene como objetivo fijar la edad
mínima para contraer matrimonio a los 18 años. Las intervenciones
principales de la conferencia corrieron a cargo del jeque sunita Malek
al-Shaar, muftí del norte del Líbano; del jeque chiita Abbas al-Jawhari,
presidente del Centro Árabe para el Diálogo; y del obispo
Hanna Alwan, Vicario Patriarcal Maronita.
El mufti Malek al-Shaar recordó que el Islam no establece una edad legal
para el matrimonio, y “por lo que cualquier persona que pueda casarse
está autorizada a hacerlo”. Por eso, de acuerdo con la ley Sharia, no
estaba prohibido casarse incluso con niños menores de 10 años. “Incluso
si las costumbres y tradiciones difieren de un siglo a otro, de un país a
otro y de una cultura a otra”, -dijo el representante sunita-, “las
cosas están evolucionando en muchos países árabes” como Egipto o
Jordania, mientras que en otros países de mayoría sunita se ha
establecido la edad mínima para contraer matrimonio en el caso de las
mujeres en los 17 años, y para los hombres en los 18. El jeque chiita
Abbas al Jawhari, en su discurso, señaló que en el mundo islámico se
convertía en esposas a las niñas “con el pretexto de que el Profeta se
habría casado con Aisha, que tenía solo nueve años”, pero ese hecho
“nunca ha sido probado”.
El representante chiita dijo que estaba a favor de introducir la norma
de la edad mínima de 18 años para el matrimonio en el Líbano. En su
discurso, también mencionó la fatwa emitida por los ayatolás iraníes que
autorizan el matrimonio precoz, añadiendo que las leyes religiosas y
las civiles deben ser reguladas recurriendo a métodos que puedan superar
las interpretaciones literales de los Textos Sagrados.
En su intervención, el obispo maronita Hanna Alwan recordó que, de
acuerdo con el derecho canónico de las Iglesias orientales católicas,
“el matrimonio antes de los 18 años es rechazado y desaconsejado
encarecidamente”, permitido solo en casos especiales (por ejemplo,
cuando la menor se ha quedado embarazada) y requiere la autorización no
solo de los padres, sino también del obispo. Además, la Iglesia no duda
en declarar inválido un matrimonio cuando se descubre que ha sido
contraído bajo coacción o que uno de los cónyuges no tenía la madurez
requerida para formar una nueva familia.