Erevan, TURQUÍA (Agencia Fides, 23/02/2018) - La crisis que atormenta desde hace tiempo al
Patriarcado Apostólico Armenio de Constantinopla se debe ante todo a las
divisiones internas que han abierto la puerta a la interferencia de
poderes y grupos externos. Los sumos sacerdotes que tienen puestos de
responsabilidad en ese grupo eclesial deben dejar de lado los intereses
personales y los conflictos, y el gobierno turco debe permitir al
Patriarcado reiniciar el proceso, - que esta interrumpido -, para la
elección de un nuevo Patriarca. Estas son las consideraciones y
solicitudes expresadas por la Asamblea del Consejo Espiritual Supremo
del Catholicosado de Echmiadzin, gobernado por el Patriarca Karekin II,
quien ha dedicado la última reunión (20-22 de febrero) a los lamentables
y recientes acontecimientos que llevaron a la interrupción del proceso
para la elección de un nuevo patriarca armenio de Constantinopla, en
sustitución del patriarca Mesrob II Mutafyan, que desde 2008 sufre una
enfermedad neurológica que lo ha incapacitado.
A principios de febrero, la oficina del gobernador de Estambul cancelo
el proceso electoral iniciado en 2016. Las autoridades turcas
dictaminaron que “no existen las condiciones necesarias” para avanzar en
el proceso electoral, ya que Mutafyan todavía está vivo y las
disposiciones legales turcas estipulan que un nuevo patriarca armenio
puede ser elegido y establecido solo cuando el puesto permanezca vacante
tras la muerte de su predecesor. Esta estrategia de las autoridades
turcas provocó fuertes reacciones dentro de la comunidad armenia local.
El semanario bilingüe Agos escribió en un editorial que la decisión
implementada por la gobernación de Estambul está destinada a marcar la
historia de las relaciones entre la comunidad armenia y el estado turco,
añadiendo el gobierno dirigido por el AKP de Erdogan ha realizado un
serio acto de interferencia “en las tradiciones de la Iglesia Armenia”. Y
todo esto había sucedido después de que el Patriarcado Armenio de
Constantinopla, como otras realidades eclesiales en Turquía, expresase
explícitamente su deseo del éxito de la operación "rama de olivo", la
ofensiva militar turca en territorio sirio contra los kurdos, llamando a
sus fieles a “orar por el final de las actividades terroristas”.
Ahora, el concilio espiritual supremo del Catholicosado de Echmiadzin,
en el llamamiento generalizado al final de su asamblea, reconoce que la
actitud imprudente de algunos individuos y grupos eclesiales dentro del
patriarcado armenio de Constantinopla ha allanado el camino para la
“interferencia externa”, incluidas la de los aparatos políticos turcos.
La oficina patriarcal armenia de Echmiadzin apela en particular a las
figuras más prominentes de la jerarquía del patriarcado armenio de
Constantinopla para que reconozcan que los intereses del Patriarcado
valen más que sus aspiraciones individuales y sus relaciones
deterioradas, a fin de revisar y corregir el proceso electoral, que
obviamente ha iniciado con el pie equivocado. El llamado del
Catholicosado de Echmiadzin también pide a las autoridades turcas que
acepten la solicitud de la comunidad armenia local para reiniciar el
proceso de elección de un nuevo Patriarca.
Como ya había documentado Fides, después de la
elección – el 15 de agosto 2016 – del Arzobispo Karekin Bekdjian como
nuevo “locum tenens” del Patriarcado, en sustitución del Arzobispo Aram
Ateshyan, y después del establecimiento del grupo de trabajo encargado
de avanzar en el proceso electoral, las cartas oficiales enviadas por el
Patriarcado armenio a las autoridades turcas para solicitar los
procedimientos para la elección del Patriarca no han recibido respuesta.
Desde agosto, se ha manifestado la
aversión de los aparatos turcos hacia el actual locum tenens del
Patriarcado. Una aversión que también está vinculada a las divisiones y
los antagonismos presentes dentro del patriarcado armenio, especialmente
por parte de los exponentes vinculados al antiguo locum tenens, el
arzobispo Aram Ateshyan.