martes, 1 de julio de 2014

Llamamiento del Patriarca Louis Raphael I Sako por la liberación de las religiosas y los huérfanos secuestrados


Baghdad, IRAQ (Agencia Fides) – El Patriarca de Babilonia de los Caldeos, Louis Raphael I Sako, ha hecho un llamamiento público a “los que tienen secuestrados en Mosul desde hace tres días a las religiosas y huérfanos”. Según la información recabada por la Agencia Fides, en el llamamiento se expresa preocupación por la suerte de las dos religiosas y los tres jóvenes - dos chicas y un chico – y se pide que sean liberados pronto. En particular, el Patriarca se dirige a los líderes religiosos musulmanes y a los jeques de las tribus sunitas de Mosul, pidiéndoles que hagan “todo lo posible” para lograr la liberación de los rehenes. En el llamamiento, el patriarca caldeo cita los versículos del Corán que indican a todos los creyentes que traten bien a los monjes y a los huérfanos, recuerda que los cristianos “fueron los primeros en recibir a los conquistadores musulmanes hace 14 siglos”, y que en la Iraq actual, los cristianos en cuanto tales no se identifican con ningún bando po lítico. “Este – dice para terminar el Patriarca Sako - es el mes del Ramadán, el mes de la misericordia y la caridad. Oremos todos para que regresen en paz las monjas y los huérfanos secuestrados”.


Desde el sábado 28 de junio se ha perdido el contacto con las hermana Atur y Miskinta, dos religiosas caldeas de la Congregación de las Hijas de María Inmaculada que regresaban a Mosul en coche desde Dohuk, en compañía de dos chicas y un chico cristianos. Las dos monjas dirigen y gestionan una casa de acogida para huérfanos de Mosul, cerca del arzobispado caldeo.


Frente a la ofensiva islamista que comenzó el 9 de junio, las religiosas y todos los huéspedes de la casa de acogida habían salido de Mosul para refugiarse en la ciudad de Dohuk, en el Kurdistán iraquí. Desde entonces la hermana Atur había hecho incursiones rápidas a Mosul para comprobar el estado de la casa y recuperar objetos e instrumentos de trabajo y de estudio para las niñas obligadas a huir de sus hogares. Sólo en el comunicado de prensa emitido hoy, el Patriarca Sako habla de “secuestro” al referirse a la desaparición de las religiosas y los tres jóvenes.