lunes, 13 de julio de 2015

Papa FRANCISCO se despide de Paraguay encontrando a los jóvenes

Imagen: www.infocatolicos.com

PARAGUAY, 12 de julio de 2015 (VIS).- El Papa FRANCISCO se despidió de Paraguay encontrándose con doscientos mil jóvenes en el paseo marítimo de Costanera, donde en lugar de dirigirles el discurso que tenía preparado departió con ellos, respondiendo a los testimonios que habían presentado tres jóvenes, llamados Orlando, Liz y Manuel. Un diálogo a varias voces del que damos una amplia síntesis. 

''Después de haber leído el Evangelio, Orlando se acercó a saludarme y me dijo: “Te pido que reces por la libertad de cada uno de nosotros, de todos”. Es la bendición que pedimos ahora todos juntos: la libertad. Porque la libertad es un regalo que nos da Dios, pero hay que saber recibirlo, hay que saber tener el corazón libre, porque todos sabemos que en el mundo hay tantos lazos que nos atan el corazón y no dejan que el corazón sea libre. La explotación, la falta de medios para sobrevivir, la drogadicción, la tristeza, todas esas cosas nos quitan la libertad. Así que, todos juntos, agradeciéndole a Orlando que haya pedido esta bendición, tener el corazón libre, un corazón que pueda decir lo que piensa, que pueda decir lo que siente y que pueda hacer lo que piensa y lo que siente. ¡Ese es un corazón libre! Y eso es lo que vamos a pedir todos juntos, esa bendición''.
 
''Y hemos escuchado dos testimonios: el de Liz y el de Manuel.... Liz podía haber tranquilamente puesto a su mamá en un asilo, a su abuela en otro asilo y vivir su vida de joven, divirtiéndose, estudiando lo que quería. Y Liz dijo: “No”... Y ella quemó su vida, hasta ahora, hasta los 25 años, sirviendo a su mamá y a su abuela. ¿Sola? No...Ella habló de ...una tía que fue como un ángel; y habló del encuentro con los amigos los fines de semana, con la comunidad juvenil de evangelización, con el grupo juvenil que alimentaba su fe. Y esos dos ángeles... le daban más fuerza para seguir adelante. Y eso se llama solidaridad.
 
Primero: libertad, corazón libre... Segundo: solidaridad para acompañar”. Solidaridad. Eso es lo que nos enseña este testimonio. Y a Manuel no le regalaron la vida.... Dijo palabras duras: “Fui explotado, fui maltratado, a riesgo de caer en las adicciones, estuve solo”.  
Explotación, maltrato y soledad. Y en vez de salir a hacer maldades, en vez de salir a robar, se fue a trabajar. En vez de salir a vengarse de la vida, miró adelante....Esperanza, trabajo, luchar por la vida, salir adelante:; lo que nos decía Manuel. Como ven, la vida no es fácil para muchos jóvenes. Y esto quiero que lo entiendan., quiero que se lo metan en la cabeza: “Si a mí la vida me es relativamente fácil, hay otros chicos y chicas que no le es relativamente fácil”. Más aún, que la desesperación los empuja a la delincuencia, los empuja al delito, los empuja a colaborar con la corrupción. A esos chicos, a esas chicas, les tenemos que decir que nosotros les estamos cerca, queremos darles una mano, que queremos ayudarlos, con solidaridad, con amor, con esperanza''.
 
''Hubo dos frases que dijeron los dos que hablaron, Liz y Manuel. Dos frases, son lindas. Escúchenlas. Liz dijo que empezó a conocer a Jesús, conocer a Jesús, y eso es abrir la puerta a la esperanza. Y Manuel dijo: “Conocí a Dios, mi fortaleza”.... O sea, conocer a Dios, acercarse a Jesús, es esperanza y fortaleza. Y eso es lo que necesitamos de los jóvenes hoy: jóvenes con esperanza y jóvenes con fortaleza. ..¿Por qué? Porque conocen a Jesús, porque conocen a Dios. Corazón libre, Solidaridad. Trabajo. Esperanza. Esfuerzo. Conocer a Jesús. Conocer a Dios, mi fortaleza. ¡Ese es el camino! Pero para eso, hace falta sacrificio, hace falta andar contracorriente. Las Bienaventuranzas que leímos hace un rato son el plan de Jesús para nosotros. El plan... Es un plan contracorriente. Jesús les dice: “Felices los que tienen alma de pobre”. No dice: “Felices los ricos, los que acumulan plata”. No. Los que tienen el alma de pobre, los que son capaces de acercarse y comprender lo que es un pobre. Jesús no dice: “Felices los que lo pasan bien”, sino que dice: “Felices los que tienen capacidad de afligirse por el dolor de los demás''.
 
''Y me tengo que ir.. El otro día… El otro día, un cura en broma me dijo: “Sí, usted siga haciéndole… aconsejando a los jóvenes que hagan lío. Siga, siga. Pero después, los líos que hacen los jóvenes los tenemos que arreglar nosotros”. ¡Hagan lío! Pero también ayuden a arreglar y a organizar el lío que hacen. Las dos cosas: ¡hagan lío y organícenlo bien!. Un lío que nos dé un corazón libre, un lío que nos dé solidaridad, un lío que nos dé esperanza, un lío que nazca de haber conocido a Jesús y de saber que Dios, a quien conocí, es mi fortaleza. Ese es el lío que hagan''.
 
Acabado el encuentro, el Papa se trasladó al aeropuerto de Asunción y, en el camino se detuvo para bendecir los locales de Ycuá Bolaños, un centro comercial reconstruido tras el peor accidente civil de la historia de Paraguay, un incendio que causó 400 muertos y 500 heridos.
 
Llegado al aeropuerto el Santo Padre recibió el saludo del Presidente de Paraguay y a las 19 (hora local), emprendió el vuelo de regreso a Roma donde su avión ha aterrizado poco antes de las 14.00 (hora italiana).
Imagen: EFE / es.noticias.yahoo.com