Santiago, CHILE (Agencia Fides, 14/06/2017) – “Se esta abriendo aún más la puerta para que
el Estado arrebate a los ciudadanos su libertad para decidir a favor de
la protección de la vida de un ser humano” ha dicho Mons. Fernando
Ramos, Obispo Auxiliar de Santiago Secretario General de la Conferencia
Episcopal de Chile (CECh), en el momento en el que la Comisión del
Senado se prepara para votar la ley sobre el aborto. En esta nueva ley
se establece que solo el médico puede declararse “objetor de conciencia”
pero no el resto del equipo para-médico que lo asiste,algo que ha
provocado muchas reacciones contrarias también por parte de la iglesia.
Mons. Ramos ha declarado a la prensa: “No es humano, ni democrático, ni
cívico”.
El obispo explica, en la nota enviada a la Agencia Fides por la CECh,
que según la nueva ley, “todos lose establecimientos de salud, como
hospitales, clínicas universitarias y privadas, cuyo ideario u
orientación institucional tenga una clara opción a favor de la
protección y defensa de la vida humana siempre y en toda circunstancia,
podrían verse obligados a ir en contra de sus definiciones
institucionales, pues tendrían que aceptar la realización de abortos en
sus dependencias, al establecerse que son una legítima prestación de
salud”. En la práctica cada centro sanitario tendrá que aceptar esta
“prescripción sanitaria” y también el personal (anestesistas, matronas,
enfermeras, técnicos, auxiliares, etc) que no podrá negarse por ir
contra su propia conciencia cristiana o contras los principios en favor
de la defensa de la vida. “¿Acaso el Estado puede decidir por nosotros?
¿Puede decidir por las instituciones? No queremos un Estado que decida
por
nosotros, anulando nuestras conciencias y vulnerando nuestra libertad”
concluye Mons. Ramos.