PARAGUAY (Agencia Fides, 22/12/2017) - Los paraguayos se sienten hijos de la "Virgencita" de Caacupé. Cada año,
el 8 de diciembre, la fiesta de la Inmaculada Concepción, es también la
fiesta de Nuestra Señora de los Milagros de la "capital espiritual de
Paraguay". Su devoción, que es muy popular, nació gracias a un indio
guaraní que invocó a la Inmaculada y se salvó del ataque de una tribu
hostil. Por esta razón, cada año la homilía de la Misa del 8 de
diciembre, pronunciada ante las más altas autoridades del Estado,
sentados en la primera fila y en vivo por televisión, radio e Intenet,
tiene un peso bastante considerable, hasta el punto de ser capaz de
influir en las decisiones de los ciudadanos. En 2017, a las puertas de
un 2018 que estará marcado por las elecciones, el nuevo obispo, monseñor
Ricardo Valenzuela Ríos, arremetió contra la clase política. Y el 17 de
diciembre, tan solo 9 días después del feriado, las elecciones para la
elección de los candidatos
presidenciales de los partidos vieron una clara derrota de Santiago
Peña, "el hombre del presidente" Horacio Cartes.
Con motivo del lanzamiento del libro "Homilías completas. Fiestas de
Caacupé 1995-2016 ", la Agencia Fides le preguntó al Obispo emérito
Claudio Giménez Medina, durante 22 años al frente de la ciudad donde se
encuentra el Santuario: "Recolectaba datos sobre la situación nacional,
dedicando mucha atención a los eventos nacionales. Mantenía en mente lo
que dijeron los obispos paraguayos durante el año y los documentos de la
Iglesia en América Latina, del CELAM (Consejo Episcopal
Latinoamericano). Y, por supuesto, tenía la Palabra de Dios como base
fundamental: nacieron las homilías", dice. Antes de retirarse a la
soledad para refinar el texto, Mons. Giménez llamó a todos los
sacerdotes presentes durante la novena que precede a la fiesta,
recibiendo correcciones y sugerencias.
Con respecto al aspecto catequético, sobre cómo hacer vivo el dogma de
la Inmaculada Concepción en la vida de las personas, el Obispo emérito
señala a Fides: "La Inmaculada es incorrupta, y San Pablo dice que
fuimos creados, antes de la creación del mundo, incorruptos e
irreprochables en Jesucristo. Esta es una gran ayuda, que no solo ha
tenido Nuestra Señora, sino también nosotros, aunque María ha sido
preservada del pecado original".Mons. Giménez, quien en 2015 dio la
bienvenida al Papa Francisco peregrino a Caacupé con motivo de su viaje
apostólico, recuerda que los paraguayos son "marianos" por naturaleza:
"Paraguay nació con la Virgen de la Asunción, que marcó el destino de su
pueblo. Su capital, Asunción, fue fundada el 15 de agosto. El país, la
gente, la nación, nacieron con la presencia de la Virgen María entre
nosotros. Y los franciscanos ponen amor por Nuestra Señora en el corazón
de nuestra gente, especialmente la Inmaculada
Concepción".