Anagni, ITALIA (Agencia Fides, 28/12/2017) – “El domingo 10 de diciembre, antes de partir
hacia Italia desde la misión de Adaba, en Etiopía, donde estoy en mi
cuarto año como fidei donum, he querido reunirme con mis feligreses para
proponerles un camino para el tiempo de Adviento y de Navidad con el
objetivo de orar todos los días por alguna intención. Tomando el ejemplo
del lema del Día de la Infancia Misionera 2018 “Mira con amor”, he
pedido que lo comenten, que piensen en quién nos mira con amor. Todos
han respondido: Dios, Jesús, nos mira con amor”. Así lo ha contado a la
Agencia Fides el padre Giuseppe Ghirelli, misionero Fidei donum de la
diócesis de Anagni.
“Sí, tenemos un Padre que nos ama y que siempre está cerca de nosotros
en el camino de la vida. Su único Hijo, Jesús, se hizo hombre por
nosotros, para estar más cerca nuestro. Esto es la Navidad: ¡Dios con
nosotros!”, continúa explicando don Giuseppe, que está a cargo de la
Oficina Misionera de la Prefectura Apostólica de Robe.
“Este pensamiento me sostiene en mi trabajo misionero en un contexto
completamente diferente al que estaba acostumbrado, donde no es fácil
encajar, sentirse a gusto. Me cuesta adentrarme en esta nueva realidad,
pero sé que Él me mira y me sigue con amor y esto me da fuerzas. Este
pensamiento me lleva a mirar con amor la realidad y las personas con las
que me relaciono, especialmente las muchas personas pobres que están
esperando experimentar que alguien los mira con amor, que no están
abandonados a sí mismos. Ellos, los pobres, tienen una gran fe en Dios,
pero luego están solos para hacer frente a las situaciones difíciles en
las que viven. Pido al Señor que continúe ayudándome a mirar con amor y
atención a las personas con las que estoy en contacto”, agrega el
misionero.
Adaba, como toda la Prefectura Apostólica de Robe, es una zona
predominante musulmana donde los católicos son una pequeña minoría. Aquí
hay mucho en lo que hacerse presente, estar cerca, conocer, compartir
la vida de las personas, ayudarles a tener más posibilidades en su
difícil existencia”, concluye don Giuseppe.