Estambul, TURQUÍA (Agencia Fides, 05/01/2018) – La histórica iglesia búlgara de Sveti Stefan
(San Estaban), que domina el Cuerno de Oro, se está preparando para
volver a abrir sus puertas a los fieles y visitantes después de que las
largas obras de restauración la hayan mantenido cerrada durante siete
años. El lugar de culto se reabrirá el próximo 7 de enero, con una
ceremonia en la que participarán el presidente turco, Recep Tayyip
Erdoğan, y el primer ministro búlgaro, Boyko Borisov. En la inauguración también está prevista la participación del
Patriarca Ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I, y del Patriarca
Ortodoxo de Bulgaria Neofit.
Los aparatos y medios turcos presentan el evento como un emblema de la
campaña gubernamental destinada a restaurar el brillo de las iglesias y
sinagogas históricas en todo el país, y también ponen de relieve los
valores geopolíticos potenciales: desde el uno de enero, Bulgaria,
miembro de la Unión Europea desde 2007, ha comenzado su primera ronda
semestral en la Presidencia del Consejo de la UE.
Construida por la comunidad búlgara en el siglo XIX, la iglesia Sveti
Stefan también es conocida como la “iglesia de hierro” porque es la
única iglesia en el mundo cuya estructura principal está formada
principalmente de ese metal. La restauración, que comenzó hace siete
años y ha costado 16 millones de dólares, ha sido co-financiada por la
Municipalidad de Estambul y Bulgaria.
Los medios de comunicación más cercanos al gobierno han hablado de la
restauración de la “iglesia de hierro” para recordar los esfuerzos
realizados por la Turquía de Erdogan para dar vitalidad a las iglesias y
sinagogas históricas en el país. En los últimos diez años, según los
datos proporcionados por fuentes oficiales turcas,a través de la
Dirección General de Fundaciones, se ha comenzado la restauración de 14
iglesias y sinagogas, a pesar de la disminución de visitantes cristianos
y judíos del extranjero.
Entre los lugares de culto restaurados están la Gran Sinagoga en Edirne,
la iglesia de Aya Nikola en la isla de Gökçeada en el Egeo, la iglesia
greco-ortodoxa de Aya Yorgi en Estambul.
La re-apertura de la “iglesia de hierro” también ha sido vista por los
observadores a la luz de un posible proceso de re definición de las
relaciones entre Turquía y la Unión Europea. “Olvidémonos de la
hipocresía sobre el proceso de adhesión de Turquía a la UE”, dijo el
primer ministro búlgaro Borisov hace unos días, y agregó que “lo mejor
que se puede hacer es sentarse y llegar a un acuerdo especial entre
Turquía y la UE”.