Managua, NICARAGUA (Agencia Fides, 06/06/2018) – El gobierno de los Estados Unidos apoya los
esfuerzos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua en la búsqueda de una
solución negociada al conflicto en curso en el país: informarlo a
través de las redes sociales, es el Vicepresidente Pence en una
recepción de la OEA (Organización de Estados Americanos), hace pocas
horas. Estas son sus palabras:
"En Nicaragua, el gobierno de Daniel Ortega, como todos sabemos, está
cometiendo y justificando una terrible violencia en contra de su gente
en los últimos días, incluyendo ataques a una protesta pacífica durante
la celebración del Día de las Madres en ese país que dejó cientos de
heridos y asesinados a casi una docena de personas inocentes. El sábado
de esta semana, ese caos reclamó la vida de un ciudadano estadounidense.
Y nuestro más sentido pésame a su familia, y a todos aquellos quienes
han perdido un ser querido en esta violencia sin sentido y crisis. Los
Estados Unidos y nuestros aliados deben hablar al unísono y decirle al
gobierno de Ortega: La violencia debe terminar, y la violencia debe
terminar ahora. Los Estados Unidos apela al gobierno de Ortega para que
detenga estos ataques a protestantes pacíficos y defienda los derechos
básicos de sus ciudadanos, y que Nicaragua regrese hacia una
democracia".
El Diálogo Nacional, en el cual los Obispos participan como testigos y
mediadores entre el ejecutivo y la sociedad, fue suspendido oficialmente
el 31 de mayo, debido a que el gobierno continuaba la represión contra
la población. Sin embargo, los representantes de la Iglesia Católica han
llamado la atención de las organizaciones internacionales y los medios
de comunicación sobre la dramática situación que atraviesa el país.
La Unión Europea señaló en una declaración que su simpatía está con las
familias de las víctimas del 30 de mayo pasado. Para este organismo, la
continua violencia en el país y el uso excesivo de la fuerza por la
Policía y grupos “incontrolados” son inaceptables, dado que violan
derechos básicos de los ciudadanos y hacen más difíciles las condiciones
para un diálogo pacífico. El Nuncio Apostólico en Nicaragua, tras su
encuentro privado con el Papa Francisco en el Vaticano para hablar sobre
la actualidad política-social de este país ha declarado: "El Santo
Padre está bien informado y reza mucho para que se llegue a una solución
pacífica, por medio de este diálogo nacional en el cual la Iglesia
tiene el papel de mediadora y jamás se retira de sus propias
responsabilidades. La Iglesia de Nicaragua nunca ha abandona a su
pueblo", subraya el prelado polaco. "En cualquier ámbito de la vida de
estas personas, la Iglesia es una presencia cercana,
misericordiosa, fraterna, espiritual pero también es una presencia bien
concreta, materialmente hablando. Estoy convencido, de que en este
delicado momento hace falta mucha oración, prudencia y coraje en la
defensa del buen sentido común para encontrar una solución pacífica"
concluye Mons. Sommertag.
Nicaragua vive desde casi dos meses una crisis sociopolítica, la más
sangrienta desde los años 80, que está dejando más de 100 muertos y casi
mil heridos, según cifras del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos
(Cenidh). Las protestas contra el gobierno de Daniel Ortega comenzaron
en abril por las fallidas reformas a la seguridad social y se acentuaron
por el asesinato de jóvenes manifestantes. A cualquier pedido de justicia de la población se le
responde con la represión.