Bangui, REPÚBLICA CENTROAFRICANA (Agencia Fides, 07/06/2018) - Hay “pruebas contundentes” de la implicación de
dos mercenarios franceses sospechosos en la matanza perpetrada el 1 de
mayo en la parroquia de Notre Dame de Fátima, en Bangui, capital de
República Centroafricana. Así lo reveló el Fiscal
General Eric Didier Tambo.
De acuerdo con el magistrado centroafricano, la matanza fue cometida por
hombres a cargo de Nimery Matar Djamous, llamada “Force”, jefe de la
milicia principal que controla el barrio PK5 donde vive la mayoría de la
población musulmana de Bangui y que se encuentra no muy lejos de la
iglesia donde tuvo lugar la matanza, que dejó un saldo de 26 muertos,
entre ellos el padre Albert Toungoumale-Baba, un cura de Centroáfrica
muy querido por los fieles.
El Fiscal General declaró que había emitido una orden de arresto contra
Djamous y dos órdenes de arresto internacional contra los dos ciudadanos
franceses, acusados de haber “ayudado, entrenado y facilitado a Djamous
actos de terrorismo contra la iglesia de Nuestra Señora de Fátima”.
Sobre los dos ciudadanos franceses, Christophe Raineteau, alias Alpha, y
Bernard Cousin, pesan las mismas acusaciones de “terrorismo, asesinato,
rebelión e incitación al odio”. Entre las “pruebas abrumadoras”
recopiladas por la justicia centroafricana contra los dos hombres, el
Fiscal General citó “documentos, fotos y grabaciones de audio”.
Al mismo tiempo, la Misión de la ONU en África Central (MINUSCA)
advirtió contra “la propaganda destinada a desestabilizar las
instituciones democráticas del país reavivando deliberadamente las
tensiones religiosas y comunitarias con declaraciones sin ningún
fundamento”.