Kinshasa, REPÚBLICA
DEMOCRÁTICA DEL CONGO (Agencia Fides, 10/07/2014) - La Caritas de la
República Democrática del Congo (RDC) ha lanzado un llamamiento
para ayudar a los congoleños expulsados de la República del Congo
(Congo Brazzaville) que se encuentran en precarias condiciones en un
campo de refugiados en el este de Maluku en la periferia de Kinshasa.
Se estima que al menos 2.400 personas, de las cuales hay miles de
niños, viven en la zona desde mayo, cuando comenzaron las
operaciones en materia de expulsión de los congoleños ilegales de
Brazzaville.
Estas personas
vienen de otras zonas de la República Democrática del Congo y no
tienen los medios necesarios para volver. “Que toda persona de
buena voluntad puede venir en ayuda de nuestros hermanos y hermanas
que viven en condiciones difíciles. Hay muchos expulsados que
necesitan regresar a sus provincias. Si hay personas que creen que
pueden poner a su disposición los medios para que regresen a casa,
esto les ayudaría a salir de las condiciones precarias en las que
viven”, dice Gratien Mundia, coordinador de operaciones de
emergencia y protección social de Cáritas RDC. Cáritas ha
organizado la recogida y distribución de artículos de primera
necesidad en el campo de Maluku, algunos de los cuales proporcionados
por la MONUSCO (Misión de la ONU en la República Democrática del
Congo).