Bangui, REPÚBLICA CENTROAFRICANA (Agencia Fides,
13/01/2018) – “Pronto tendremos nuevos servicios sanitarios
disponibles para los centroafricanos en 2018. Se abrirán los
departamentos de neonatología, maternidad, cirugía y la escuela para un
año de educación en enfermería. Gracias al proyecto de nuestra Ong, ha
sido posible desarrollar y re-cualificar el hospital San Juan Pablo II,
que iniciaron las religiosas carmelitas de Turín en Bossemptélé”: así lo
explica a la Agencia Fides el padre Efesio Locci, MI, presidente de la
ONG Camiliana, “Salud y Desarrollo” que se ocupa de diversos proyectos
en la República Centroafricana desde 2012. En un país definido como “el
más pobre que yo he visto entre muchos”, el camiliano explica: “Nuestra
presencia está en continuidad con la de las Hermanas Carmelitas de Turín
que ya estaban en Bozum con un pequeño hospital. El hospital aún no
estaba terminado cuando, después de un accidente de tráfico en 2007 en
el que, la hermana María Ilaria Meoli,
doctora, una de las fundadoras del centro, falleció. Desde ese momento
nos ocupamos del pequeño hospital. Actualmente, cuatro padres camilianos
trabajan allí, mientras que dos hermanas de comunidad de la hermana
Ilaria colaboran en la gestión del hospital y la parroquia. Otras cuatro
hermanas se dedican a la escuela infantil y de primaria, a la que
asisten unos 800 niños”.
“El objetivo del hospital - dice el misionero - es ofrecer servicios de
medicina básica. Aquí se muere de enfermedades prevenibles. Muchas
personas enfermas no van al hospital porque no pueden pagarlo. El
personal del hospital esta formado por un médico local, dos enfermeras
profesionales, algunas enfermeras generales y auxiliares, así como un
par de obstetricias.
Bossemptélé es un gran pueblo con más de 14 mil habitantes, a unos 350
km de la capital, Bangui. “Después de la guerra que estalló en 2013
entre las milicias Seleka y anti-Balaka, - informa el padre Locci - el
hospital y la parroquia se han convertido en el refugio de miles de
musulmanes que han sido blanco de las milicias anti-Balaka. En este
contexto, el país ha experimentado un nuevo aumento en la situación de
pobreza y miseria. En tres años de guerra, más del 50% de las escuelas y
hospitales han sido destruidos y todo tiene que ser reconstruido
todavía”.
En noviembre de 2014, aniversario de la presencia camiliana en
Bossemptélé, la comunidad recibió el premio “Alison des Forges” como
reconocimiento por la defensa de los derechos humanos: por el coraje al
arriesgar sus vidas para proteger su existencia, la dignidad y los
derechos de otras personas.
La Iglesia Católica en el país tiene nueve diócesis: la comunidad de
Bossemptélé está en la diócesis de Bouar. Los católicos, junto con los
cristianos protestantes, representan el 80% de la población
centro-africana.