Tashkent, UZBEKISTÁN (Agencia Fides, 27/11/2018) – “El diálogo interreligioso es una
característica inherente a la realidad uzbeka. Este espíritu se expresa y
vive intensamente, como sucedió también en la Jornada Internacional de
la Tolerancia”. Es lo que explica el Administrador Apostólico de
Uzbekistán, el padre Franciscano Jerzy Maculewicz, OFM Conv, al hablar
de la Jornada reconocida por la UNESCO en 1995 y que se celebra todos
los años en noviembre.
El franciscano explica: “La Universidad Islámica de Tashkent ha
organizado una serie de reuniones y conferencias en presencia de líderes
religiosos y miembros de los centros culturales presentes en el país,
una oportunidad para el intercambio y el intercambio fructífero”.
El padre Maculewicz participó en la iniciativa representando a la
Iglesia Católica en Uzbekistán: “Durante una primera reunión, cada líder
religioso habló sobre la visión según su propia doctrina, de la
tolerancia y las relaciones con otras profesiones religiosas. También
hubo una conferencia organizada por el movimiento juvenil. Pude hablar
de cómo vive la tolerancia la Iglesia católica, haciendo referencia a
las indicaciones del Papa Francisco”.
Hoy en Uzbekistán hay exponentes de 80 nacionalidades diferentes que se
reúnen en centros culturales con los que la comunidad católica está
constantemente relacionada. El 80% de la población uzbeka es de religión
islámica, el 8% pertenece a la Iglesia ortodoxa rusa, mientras que
otras confesiones religiosas son minoritarias.
La presencia católica local consiste en cinco parroquias, para un total
de aproximadamente 3.000 bautizados, distribuidos entre las ciudades más
importantes del país. Hay alrededor de 700 fieles católicos activos en
Tashkent, mientras que los otros están distribuidos entre Samarcanda,
Bukhara, Urgench y Fergana. La fe en esta nación de Asia Central, una
vez parte de la Unión Soviética, creció bajo el pontificado del Papa
Woytjla y tuvo un punto de inflexión en 2005 gracias a las
Constituciones Apostólicas de Juan Pablo II (la última tiempo está
fechada el 1 de abril de 2005 y se llama “Usbekistaniae”) lo que elevó a
la Missio sui iuris al rango de Administración Apostólica de
Uzbekistán, confiándola al cuidado pastoral de los Hermanos Menores
Conventuales.