Dili, TIMOR ORIENTAL (Agencia Fides, 30/11/2018) – “Estamos llamados a hacer rica espiritualmente a
nuestra iglesia en Dili”. Es el llamamiento hecho por el obispo Virgilio
do Carmo, salesiano al frente de la diócesis de Dili, ante una asamblea
de sacerdotes, religiosos, laicos y operadores pastorales de la
comunidad local. “Os pido a cada uno que colaboréis con el párroco para
que esta Iglesia sea más fuerte y más sólida, no solo a nivel material,
sino también a nivel espiritual, cultivando una relación profunda con
Dios”, solicitó el obispo Carmo, quien inauguró además hace unos días la
Iglesia de San Ignacio de Loyola en la zona de Railaco Kraik. Los
fieles locales han restaurado una antigua capilla. “Me gustaría
felicitarlos a todos por vuestros esfuerzos por que esta capilla
finalmente reciba la bendición de convertirse en el edificio sagrado
para la gente de Railaco Kraik”, aseguró el obispo ante una asamblea de
niños pequeños y ancianos que se reunieron para la
inauguración. La reconstrucción del edificio, gravemente dañado por los
estragos del tiempo, fue posible gracias a la disponibilidad de la gente
y también gracias a la ayuda económica de los jesuitas.
Alda de Jesús, una de las fieles locales, declara a Fides que se trata
de un momento “de gran alegría porque nos sentimos comunidad. Nuestro
compromiso y colaboración continuarán en el futuro para ahora organizar
las actividades pastorales”.
Timor Oriental es una ex colonia portuguesa anexionada a Indonesia en
1975. Obtuvo su independencia en 1999, tras un referéndum supervisado
por la ONU. Es la democracia más joven de Asia y cuenta con un millón
doscientos mil habitantes de los que el 90 por ciento se declara
católico.